El cambio climático reconfigura el panorama de la pesca mundial

Desplazamiento de especies hacia los polos

El cambio climático está impulsando a las especies marinas a migrar hacia aguas más frías en busca de condiciones de supervivencia y reproducción adecuadas. Las alteraciones en las temperaturas oceánicas y las corrientes marinas están alterando la distribución de numerosas especies, lo que lleva a la "tropicalización de los océanos templados". Ejemplos notables incluyen el atún rojo del Atlántico y el coral de arrecife, que están expandiendo su alcance hacia latitudes más altas.

Impactos en la pesca

Este desplazamiento de especies tiene implicaciones significativas para las pesquerías globales. Se proyecta que el potencial de pesca en los trópicos disminuya hasta en un 40% para fines de siglo, mientras que las regiones polares podrían experimentar un aumento de hasta un 70%. Las pesquerías industriales de países como China, Japón y Corea del Sur pueden adaptarse más fácilmente gracias a sus embarcaciones especializadas, pero las pesquerías artesanales y costeras de muchos países tropicales enfrentan desafíos significativos.

Deshielo del Ártico

El cambio climático también está abriendo nuevas oportunidades para la pesca industrial en el Ártico a medida que el hielo se derrite. Sin embargo, los frágiles ecosistemas polares podrían verse amenazados por la llegada de flotas industriales, potencialmente afectando especies como el bacalao del Ártico y el halibut de Groenlandia.

Necesidad de sostenibilidad

Para mitigar los impactos del cambio climático en la pesca, la sostenibilidad debe ser una prioridad. La creación de zonas protegidas en los océanos, que actualmente cubren solo el 4% de su extensión, es crucial para preservar la biodiversidad y limitar los efectos de la pesca industrial. Se requieren políticas basadas en la ciencia y la colaboración internacional para garantizar un acceso equitativo a los recursos oceánicos.

Reducción de emisiones

El Acuerdo de París y otras iniciativas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero son esenciales para frenar el cambio climático y reducir su impacto en los océanos. A medida que las temperaturas globales se estabilizan, se prevé que la distribución de especies cambie de manera menos drástica, lo que permitirá una mejor adaptación de las comunidades pesqueras.

El desplazamiento de las pesquerías hacia los polos es un reflejo de los impactos transformadores del cambio climático en nuestros océanos. Para garantizar un futuro en el que la pesca siga siendo una fuente de vida, es imperativo que la ciencia y la política trabajen juntas para crear soluciones sostenibles y proteger los ecosistemas marinos.

Cruz, L., Pennino, M. & Lopes, P. (2024)

Fuente: https://pescare.com.ar/la-pesca-mundial-frente-al-cambio-climatico-un-exodo-hacia-los-polos/