Superyate ruso incautado en Reino Unido: Un símbolo de las consecuencias de la guerra
El superyate de un magnate ruso amigo de Putin sigue encerrado en el Reino Unido, sirviendo como "advertencia clara" contra las acciones hostiles de Rusia.
El yate de Naumenko, incautado por las autoridades británicas
El megabuque Phi, propiedad del oligarca ruso Alexander Naumenko, fue detenido en marzo de 2022 por las autoridades del Reino Unido en respuesta a las sanciones impuestas a Rusia tras la invasión de Ucrania. Los agentes de la Agencia Nacional contra el Crimen (NCA) abordaron el yate y entregaron al capitán una orden de detención, posteriormente confirmada por el Secretario de Transporte de entonces, Grant Shapps.
Shapps explicó que los funcionarios de Londres abordaron el Phi para "enviar un mensaje claro de que no toleraremos a quienes apoyan la agresión ilegal de Putin".
Una advertencia contra las acciones hostiles de Rusia
Casi tres años después, el yate permanece atracado en el muelle de Canary Wharf, a la espera de un veredicto. Naumenko, que tiene residencia en el Reino Unido, presentó el año pasado una demanda ante el Tribunal Supremo contra el Departamento de Transporte, exigiendo la liberación de su superyate y una indemnización por su detención.
El "Phi" se ha convertido en un símbolo de la determinación del Reino Unido de responsabilizar a Rusia por sus acciones. Su presencia en Canary Wharf es un "recordatorio visible" de las consecuencias de la invasión de Ucrania y las atrocidades cometidas por el régimen de Putin.
El "Phi", un objetivo en deterioro
Un trabajador del canal cercano informó que el yate está mostrando signos de deterioro debido a su prolongada inactividad. Sin embargo, según sus observaciones, el "Phi" sigue siendo "un barco realmente potente". La razón de su aparente inactividad y las especulaciones sobre posibles reparaciones siguen siendo un misterio.
Un yate objetivo de intrusos
El "Phi" ha sido blanco de intrusos que han logrado acceder al lujoso yate, que cuenta con una bodega, una piscina y un ático en la cubierta superior. Los trabajadores del canal afirman que los intrusos suelen ser detenidos y expulsados del lugar.
La batalla legal de Naumenko
Naumenko ha apelado la detención de su yate, argumentando que es un ciudadano británico legítimo y que el Phi no está sujeto a sanciones. El juez Ross Cranston desestimó sus afirmaciones, afirmando que el yate era "un barco de alto valor [...] y su propietario, el Sr. Naumenko, amigo cercano del presidente Putin".
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