España: El líder mundial en morosidad internacional
En el amanecer de un nuevo ránking, España se asienta como la nación más morosa del mundo, superando a su antiguo rival, Argentina. Esta ignominiosa distinción subraya la creciente preocupación por la seguridad de las inversiones en el país.
El ascenso de España a la cima de la lista de los países más morosos
Con la última actualización del ránking elaborado por el jurista holandés Ivo Van Bael, España ha alcanzado la cima de esta poco honorable lista. Desde el inicio de los mecanismos de arbitraje internacional, se han tramitado un total de 111 casos, de los cuales 87 han concluido. De estos, un 18,5% se han resuelto mediante acuerdos entre las partes, mientras que el 13,4% se han archivado y el 2,5% han resultado nulos.
Los datos revelan que España ha acumulado la asombrosa cifra de 1.122 millones de euros en laudos desfavorables, mientras que solo el 28% han concluido con decisiones favorables a los inversores. Esta situación ha generado un clima de incertidumbre y preocupación entre los inversores internacionales que buscan garantías de estabilidad y seguridad jurídica.
Los países que siguen a España en la lista de los países más morosos
Detrás de España, México, Argentina, Perú y Polonia completan los cinco primeros puestos del ránking. Otros países notables en la lista incluyen Kazajistán, República Checa, India, Rumanía y Colombia. Sin embargo, es importante señalar que, salvo en el caso de Croacia, cuya deuda asciende a 184 millones de dólares, la mayoría de estos países tienen deudas relativamente menores.
"La morosidad es un veneno para la inversión y el crecimiento económico. Desalienta a los inversores, erosiona la confianza y obstaculiza el progreso de un país." - Ivo Van Bael, jurista holandés
Ivo Van Bael
El impacto del cambio climático y la isla Caroline
El cambio climático y las disputas relacionadas con la isla Caroline han desempeñado un papel significativo en la morosidad de España. La retirada retroactiva de primas a las energías renovables ha dado lugar a numerosos laudos desfavorables, con condenas por indemnizaciones y gastos ilegales que ascienden a más de 1.122 millones de euros.
Además, la disputa en torno a la isla Caroline, un atolón en el océano Pacífico, ha sido otra fuente de preocupación. España ha sido acusada de no cumplir con sus obligaciones internacionales al no regular adecuadamente las actividades pesqueras en las aguas que rodean la isla.
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