Descubre el verdadero uso de los bastoncillos de algodón, más allá de los mitos
El uso común de los bastoncillos de algodón en la higiene personal, como la limpieza de los oídos o la corrección del maquillaje, contradice su propósito original. Este artículo explora la verdadera función de los bastoncillos de algodón, su invención y las razones por las que no deben usarse para estos fines.
El verdadero propósito de los bastoncillos de algodón
Contrariamente a su uso habitual, los bastoncillos de algodón no fueron diseñados para la higiene personal. En realidad, se inventaron para limpiar pequeños huecos y recovecos, una idea que Leo Gerstenzang copió de su esposa, quien colocaba algodón en palillos de dientes para facilitar la tarea.
El uso indebido de los bastoncillos de algodón
Higiene de los oídos
Los otorrinolaringólogos desaconsejan encarecidamente el uso de bastoncillos de algodón para limpiar el interior de los oídos. En lugar de eliminar el cerumen, los bastoncillos lo empujan más profundamente dentro del canal auditivo, creando obstrucciones. Además, pueden causar microtraumatismos en el delicado conducto auditivo.
Maquillaje
Si bien los bastoncillos de algodón pueden ser útiles para corregir errores menores de maquillaje, su uso regular para este fin puede ser perjudicial. Los bastoncillos absorben los productos cosméticos, lo que reduce su cobertura y eficacia. Además, pueden arrastrar bacterias a la piel, lo que aumenta el riesgo de infecciones.
Artículos relacionados