Compromís Rompe con Sumar: Crisis en la Izquierda por la Gestión de Ayudas y Testimonios.

La izquierda española vive momentos de tensión. Más allá del ruido mediático generado por el ‘caso Koldo’, una fractura interna en el espacio Sumar se ha materializado con la decisión de la diputada de Compromís, Àgueda Micó, de abandonar el grupo parlamentario de Yolanda Díaz y adscribirse al Grupo Mixto. Esta ruptura, aunque inicialmente vinculada por muchos a la corrupción, tiene raíces más profundas, relacionadas con divergencias estratégicas y una creciente insatisfacción dentro de Compromís con la gestión de Sumar, especialmente en la respuesta a la crisis de las inundaciones en la Comunidad Valenciana. Este artículo analiza en detalle las causas de esta escisión, sus posibles consecuencias y el panorama fragmentado que se abre en la izquierda española.

El Detonante: La Gestión de la Crisis Valenciana y la Falta de Apoyo de Sumar

El punto de inflexión que precipitó la decisión de Compromís no fue, como se ha especulado ampliamente, el ‘caso Koldo’ en sí mismo, sino la percepción de que Sumar no respaldó adecuadamente las demandas de Compromís tras las devastadoras inundaciones de octubre en la Comunidad Valenciana. Compromís considera que, si bien la responsabilidad directa de la tragedia no recae sobre el presidente Sánchez, este tiene la obligación moral y política de dar cuentas sobre la gestión de la emergencia a nivel nacional y sobre el despliegue de las ayudas a los damnificados. La solicitud de Compromís era clara: que Sánchez compareciera ante el Congreso para explicar las acciones del gobierno en la crisis.

Sin embargo, la respuesta de Yolanda Díaz y Sumar fue percibida como una falta de compromiso. Díaz se mostró reacia a presionar a Sánchez, argumentando que hacerlo podría “dañar” la estabilidad del gobierno de coalición. Esta actitud generó un profundo malestar en Compromís, que acusó a Sumar de priorizar la cohesión gubernamental por encima de la defensa de los intereses de la Comunidad Valenciana y de la transparencia en la gestión de una crisis de gran magnitud. La sensación de abandono y la falta de apoyo político fueron, en última instancia, el catalizador de la decisión de Àgueda Micó de distanciarse del grupo parlamentario de Sumar.

Més y la Decisión de Romper: Un Voto Abrumador por la Independencia

La decisión de Àgueda Micó no fue una iniciativa individual, sino una decisión tomada por el Consell Nacional de Més, el partido mayoritario dentro de Compromís. El respaldo a la ruptura fue abrumador, alcanzando un 92,68% de los votos. Este alto porcentaje refleja la profunda insatisfacción que existe en Més con la línea política de Sumar y la necesidad percibida de defender una identidad propia y una agenda más acorde con las prioridades de la Comunidad Valenciana. Més, liderado por Joan Baldoví, ha mantenido históricamente una postura más crítica con el gobierno central y una mayor defensa de los intereses autonómicos.

La ruptura con Sumar se enmarca, por tanto, en una estrategia más amplia de Més por consolidar su posición como una fuerza política independiente y relevante en el panorama nacional. Al adscribirse al Grupo Mixto, Àgueda Micó gana mayor visibilidad y capacidad de influencia en el Congreso, pudiendo defender de forma más efectiva las propuestas de Compromís y negociar directamente con otros grupos parlamentarios. Esta decisión también permite a Més diferenciarse de Sumar y construir una narrativa propia, basada en la defensa del territorio y la transparencia en la gestión pública.

El Contexto de Fragmentación: La Experiencia de Podemos y el Grupo Mixto

La salida de Àgueda Micó al Grupo Mixto no es un caso aislado. Previamente, Podemos ya había dado un paso similar al inicio de la legislatura, abandonando el bloque de Sumar y formando su propio grupo parlamentario. Esta decisión, aunque motivada por diferencias ideológicas y estratégicas con Yolanda Díaz, debilitó significativamente la posición de Sumar en el Congreso, reduciendo su capacidad de negociación y su influencia en la agenda legislativa. La experiencia de Podemos sirvió como precedente para la decisión de Compromís, demostrando que la adscripción al Grupo Mixto puede ser una opción viable para aquellos partidos que buscan mayor autonomía y visibilidad.

El Grupo Mixto, en esencia, es un refugio para aquellos diputados que no cumplen con los requisitos mínimos para formar un grupo parlamentario propio (al menos 15 escaños). Sin embargo, el Reglamento del Congreso permite la constitución de un grupo parlamentario en el Mixto para formaciones con más de cinco escaños y que hayan obtenido al menos el 15% de los votos en las circunscripciones en las que se han presentado. Actualmente, el Grupo Mixto está compuesto por representantes de UPN, Coalición Canaria, BNG, Podemos (ahora con cuatro diputados tras la renuncia de Lilith Verstrynge) y el socialista José Luis Ábalos, expulsado del PSOE por su implicación en el ‘caso Koldo’. La llegada de Àgueda Micó refuerza la presencia de la izquierda en este grupo, aunque también aumenta la complejidad del panorama parlamentario.

El Futuro de la Alianza: Posibles Repercusiones en Baleares y la Chunta Aragonesista

La decisión de Més podría tener consecuencias más amplias en el seno de Compromís y sus alianzas territoriales. Més per Mallorca y Més per Menorca, los partidos aliados de Compromís en Baleares, podrían seguir el ejemplo de Més y aprobar en asamblea la salida de su diputado, Vicenç Vidal, del grupo Sumar para unirse al Grupo Mixto. Esta posibilidad aumentaría aún más la fragmentación de la izquierda en el Congreso y debilitaría la posición de Sumar en el conjunto del Estado. La decisión de los partidos baleares dependerá de su evaluación de la situación política y de sus prioridades estratégicas.

Otro actor a tener en cuenta es la Chunta Aragonesista, cuyo diputado, Jorge Pueyo, también ha mostrado en las últimas semanas algunas diferencias notables con la línea política de Sumar. Si bien Pueyo no ha anunciado públicamente su intención de abandonar el grupo parlamentario, su postura crítica podría abrir la puerta a una posible ruptura en el futuro. La fragmentación de la izquierda en el Congreso plantea serias interrogantes sobre la capacidad de Sumar para mantener su cohesión interna y para impulsar su agenda legislativa. La estabilidad del gobierno de coalición también podría verse amenazada si la situación se agrava y otros partidos deciden distanciarse de Sumar.

Más Allá del 'Caso Koldo': Un Debate Estratégico Sobre el Futuro de la Izquierda

Es crucial entender que la crisis actual en Sumar trasciende la sombra del ‘caso Koldo’. Si bien la corrupción es un problema grave que debe ser investigado y castigado, la ruptura de Compromís con Sumar tiene raíces más profundas, relacionadas con divergencias estratégicas y una creciente insatisfacción con la gestión de Yolanda Díaz. El debate sobre la gestión de la crisis valenciana, la falta de apoyo a las demandas de Compromís y la priorización de la cohesión gubernamental por encima de la defensa de los intereses territoriales son elementos clave para comprender la decisión de Àgueda Micó de abandonar el grupo parlamentario de Sumar.

Esta crisis pone de manifiesto la dificultad de construir una alianza estable y cohesionada en el espacio de la izquierda española. Las diferencias ideológicas, las tensiones territoriales y las ambiciones políticas de cada partido dificultan la consecución de un proyecto común. La fragmentación de la izquierda en el Congreso debilita su capacidad de negociación y su influencia en la agenda legislativa, lo que podría tener consecuencias negativas para los ciudadanos. La superación de esta crisis requiere un diálogo abierto y honesto entre los diferentes actores, así como una reflexión profunda sobre el futuro de la izquierda española y su papel en la defensa de los derechos sociales y la justicia social.

Fuente: https://www.huffingtonpost.es//politica/no-caso-koldo-que-parte-compromis-roto-sumar.html