PP y Palestina: Giros de 180 grados, críticas a Sánchez y el apoyo europeo al Estado Palestino.
La reciente ola de reconocimientos del Estado palestino por parte de países europeos como Portugal, Reino Unido y Francia ha reavivado el debate en España, exponiendo las contradicciones internas del Partido Popular (PP) en su postura frente al conflicto israelí-palestino. Lo que comenzó como una crítica a la decisión de Pedro Sánchez de reconocer Palestina, utilizando como argumento la supuesta soledad de España frente a las grandes potencias, se ha desmoronado a medida que más naciones se suman a esta iniciativa. Este artículo analiza la evolución del discurso del PP, sus cambios de posición y las divergencias internas que revelan una estrategia política más que una convicción ideológica.
- El Giro del PP: De la Condena al Silencio Estratégico
- Contradicciones Históricas: El Voto a Favor del Reconocimiento en 2014
- El Espectro Ideológico: De Aznar a Ayuso y la Evolución del Discurso
- La Presión Europea y el Aislamiento del PP
- El Impacto de la Crisis Humanitaria en Gaza y la Evolución del Lenguaje
El Giro del PP: De la Condena al Silencio Estratégico
En mayo de 2024, Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, cuestionaba la decisión de Sánchez de reconocer Palestina, preguntándose si “todos están equivocados excepto el señor Sánchez”. Utilizaba como justificación la falta de apoyo de Estados Unidos, Canadá y Francia, países que consideraba referentes en política internacional. Sin embargo, la rápida sucesión de reconocimientos por parte de estos mismos países ha invalidado ese argumento, dejando al PP en una posición incómoda. La estrategia inicial, basada en la confrontación directa con el gobierno, parece haber dado paso a un silencio estratégico, interrumpido solo por declaraciones ambiguas y evasivas.
Desde los atentados del 7 de octubre de 2023, el PP ha centrado su discurso en la crítica a Sánchez, minimizando o ignorando sus propias posiciones previas. Esta táctica ha permitido al partido mantener una línea dura en defensa de Israel, sin tener que abordar las complejidades del conflicto ni las consecuencias humanitarias del asedio a Gaza. La confrontación con Sánchez se ha convertido en el eje central de su narrativa, relegando a un segundo plano cualquier análisis profundo de la situación en los Territorios Palestinos Ocupados.
Contradicciones Históricas: El Voto a Favor del Reconocimiento en 2014
La ironía de la situación reside en que el propio PP, en 2014, votó a favor del reconocimiento de Palestina en el Congreso de los Diputados. Este hecho, convenientemente olvidado en los últimos meses, evidencia la falta de coherencia en la postura del partido. La justificación actual de Feijóo, que afirma “no compartir” la determinación de Sánchez, contrasta con el apoyo explícito que brindó su partido en el pasado. Esta divergencia discursiva plantea interrogantes sobre la verdadera motivación detrás de la oposición del PP al reconocimiento actual.
La evolución del discurso del PP no se limita a la solución de los dos Estados, sino que también se extiende a la definición del asedio israelí a Gaza. Mientras que comisiones independientes de la ONU y la relatora especial de Naciones Unidas para los Territorios Palestinos Ocupados han calificado este asedio como genocidio, la portavoz parlamentaria del PP, Ester Muñoz, se limitó a hablar de “situación difícil”. Esta minimización de la gravedad de la situación refleja una clara inclinación hacia la defensa de Israel, incluso a costa de ignorar las evidencias de violaciones de los derechos humanos.
El Espectro Ideológico: De Aznar a Ayuso y la Evolución del Discurso
Las diferencias internas dentro del PP se manifiestan en las declaraciones de sus líderes. José María Aznar, figura emblemática del partido, se limita a describir “lo que Israel está haciendo”, evitando cualquier juicio de valor. Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, llegó a comparar las protestas propalestinas durante La Vuelta ciclista a España con los atentados de Múnich y el sitio de Sarajevo, una analogía que generó una fuerte controversia. Estas declaraciones reflejan un espectro ideológico amplio dentro del PP, con posiciones que van desde la defensa incondicional de Israel hasta la criminalización de cualquier forma de solidaridad con el pueblo palestino.
Incluso en Alemania, donde el apoyo a Israel es tradicionalmente fuerte, figuras como Friedrich Merz, líder del CDU, han expresado su “preocupación por la situación humanitaria y la invasión terrestre en Gaza”. Merz reconoció el “grandísimo sufrimiento de la población civil” y cuestionó la proporcionalidad de la respuesta israelí, afirmando que la guerra concluiría si Hamás liberara a los rehenes y dejara las armas. Esta postura, aunque crítica con Hamás, contrasta con la línea dura mantenida por el PP en España.
La Presión Europea y el Aislamiento del PP
A medida que más países europeos se suman al reconocimiento del Estado palestino, el PP se encuentra cada vez más aislado en su postura. La creciente presión internacional y el cambio de opinión pública obligan al partido a reconsiderar su estrategia. Sin embargo, la fuerte conexión del PP con ciertos sectores de la comunidad judía y su compromiso histórico con Israel dificultan un cambio radical en su discurso. La necesidad de mantener el apoyo de estos grupos influyentes limita su capacidad de adaptación a la nueva realidad geopolítica.
La situación del PP se complica aún más por la creciente división dentro de Europa. Mientras que algunos países, como España, Portugal, Reino Unido y Francia, apuestan por el reconocimiento de Palestina como un paso hacia la solución de los dos Estados, otros, como Alemania, mantienen una postura más cautelosa. Esta fragmentación dificulta la formación de una política europea coherente frente al conflicto israelí-palestino y permite al PP encontrar argumentos para justificar su oposición al reconocimiento.
El Impacto de la Crisis Humanitaria en Gaza y la Evolución del Lenguaje
La gravedad de la crisis humanitaria en Gaza ha obligado al PP a moderar su discurso, aunque de forma muy gradual. Mientras que inicialmente se limitaba a criticar a Hamás y a defender el derecho de Israel a defenderse, Feijóo habló por primera vez de “masacre de civiles” en Gaza, aunque sin condenar explícitamente las acciones de Israel. Este cambio de lenguaje, aunque limitado, refleja la creciente presión interna y externa para que el partido reconozca el sufrimiento de la población palestina.
La evolución del discurso del PP también se ve influenciada por la creciente preocupación internacional por la posibilidad de que Israel cometa crímenes de guerra en Gaza. Las denuncias de bombardeos indiscriminados contra civiles, la destrucción de infraestructuras esenciales y el bloqueo de la ayuda humanitaria han generado una fuerte condena a nivel mundial. Ante esta situación, el PP se ve obligado a matizar su apoyo a Israel y a evitar cualquier declaración que pueda interpretarse como una justificación de las acciones del ejército israelí.




Artículos relacionados