Putin y Kim prometen un nuevo orden mundial multipolar desde Corea del Norte
Los líderes de Rusia y Corea del Norte, Vladimir Putin y Kim Jong Un, se unieron en Pyongyang para promover la creación de un "nuevo mundo multipolar", consolidando una alianza que desafía el orden geopolítico liderado por Estados Unidos.
Lazos entre Rusia y Corea del Norte
Rusia y Corea del Norte han fortalecido sus vínculos en los últimos años, aprovechando su aislamiento mutuo para apoyarse mutuamente. Moscú ha brindado respaldo político y promesas de asistencia económica a Pyongyang, mientras que Corea del Norte ha sido acusada de proporcionar armas a Rusia para su uso en la guerra de Ucrania. Ambas naciones niegan estas afirmaciones.
Construcción de un nuevo orden mundial
Durante su visita a Pyongyang, Putin elogió la resistencia de Corea del Norte a la presión estadounidense y se comprometió a "desarrollar mecanismos alternativos de comercio y solución mutua no controlados por Occidente". También propuso crear una "arquitectura de seguridad igualitaria e indivisible en Eurasia", desafiando el dominio militar de Estados Unidos y sus aliados en la región.
Implicaciones para la comunidad internacional
El "nuevo mundo multipolar" promovido por Rusia y Corea del Norte tiene implicaciones significativas para la comunidad internacional. Podría conducir a un cambio en el equilibrio de poder, con nuevos centros de influencia desafiando la hegemonía de Estados Unidos. Sin embargo, también plantea preocupaciones sobre la proliferación nuclear y la estabilidad regional, ya que Corea del Norte continúa desarrollando sus programas de armas nucleares y de misiles.
La evolución de la relación entre Rusia y Corea del Norte será monitoreada de cerca por la comunidad internacional, ya que tiene el potencial de remodelar el panorama geopolítico y las relaciones de poder globales.
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