Olor a viejito: ¿A partir de qué edad empieza y cómo evitarlo?
¿A qué edad empiezas a oler a viejito? La ciencia lo explica y también cómo quitarlo
Uno de los mayores temores que tienen los jóvenes y los jóvenes adultos es que llegando a cierta etapa, comienzan a oler a viejito o anciano. Y esto puede ocurrir muchísimo antes de lo que todos pueden imaginar o esperar. Hoy te explicamos la razón por la que llegamos a esta etapa en nuestras vidas, la detecta en la que ocurre este fenómeno, sus causas y también la forma correcta para que puedas contrarrestarlo, así que no te preocupes y aprende algo nuevo.
¿Qué sabemos sobre la molécula 2-nonenal?
El 2-nonenal es una molécula orgánica que pertenece a la familia de los aldehídos. Su nombre químico completo es «2-nonenal» y su fórmula molecular es C9H16O. La estructura química del 2-nonenal se caracteriza por una cadena alifática de nueve átomos de carbono con un grupo funcional aldehído (CHO) en el extremo de la cadena. Su estructura química se representa de la siguiente manera: CH3-(CH2)7-CHO
¿A qué edad comienzas a oler a viejito?
Según datos publicados en la revista Journal Plos One, científicos revelaron que el olor a anciano inicia a partir de los 30 años y se debe especialmente a dos moléculas que son compuestos orgánicos volátiles (VOC) como el 2-nonenal y el ácido isovalérico. Ese olor característico a queso del ácido isovalérico se produce a partir de la metabolización del sudor por las bacterias del tejido cutáneo.
Características importantes y usos destacados del 2-nonenal
A pesar de que este aroma en los humanos no es del todo agradable, la molécula tiene varias aplicaciones de interés, los cuales te compartimos a continuación:
Aroma y sabor
El 2-nonenal es conocido por su aroma y sabor característicos. Se describe comúnmente como un compuesto con un olor a nuez y notas de aceite rancio. Este aroma y sabor se han identificado en varios alimentos y aceites, y es una de las moléculas responsables de dar a algunos alimentos su perfil de sabor característico.
Reacciones de oxidación
El 2-nonenal es susceptible a la oxidación, lo que significa que puede reaccionar con el oxígeno del aire y cambiar su aroma y sabor con el tiempo. Esto es especialmente importante en la industria alimentaria, donde el rancidez de los aceites y grasas puede ser un problema debido a la formación de compuestos como el 2-nonenal.
Investigación científica
El 2-nonenal también ha sido objeto de investigación en el campo de la ciencia sensorial y la química de aromas y sabores. Su presencia y su contribución al aroma y al sabor de los alimentos se han estudiado en relación con la percepción sensorial y la calidad de los alimentos.
La percepción humana del olor a anciano
Los humanos tenemos la capacidad de identificar la edad de otros individuos a través de su olor. Este aroma característico de las personas mayores se debe a una molécula llamada 2-nonenal, presente en la piel.
¿Cuál es la edad exacta en la que aparece?
Esta es la pregunta principal que muchas personas se hacen, ya que a todos nos preocupa llegar a determinada edad empezar a oler a viejito y no darnos cuenta. Te comentamos que en diversos estudios se ha encontrado que, si bien se asocia erróneamente a la vejez, el «kareishu» puede comenzar a percibirse a partir de los 30 años, siendo más evidente a medida que avanzamos en edad.
¿Por qué se produce?
El 2-nonenal se genera por la oxidación natural de los ácidos grasos en la barrera lipídica de la piel. Este proceso se intensifica con la edad debido a:
Cambios hormonales
Después de los 30 años, la producción de hormonas como el estrógeno y la progesterona disminuye. Esto da lugar a una disminución en la actividad de las glándulas sebáceas, lo que lleva a una piel más seca y una menor producción de lípidos que actúan como barrera protectora.
Daño oxidativo
Con el paso de los años, los radicales libres aumentan en nuestro cuerpo. Estos radicales libres son moléculas inestables que pueden dañar las células y los tejidos. Al dañar los lípidos de la piel, los radicales libres contribuyen a la formación de 2-nonenal.
Inflamación
La inflamación crónica también puede contribuir a la producción de 2-nonenal. A medida que envejecemos, nuestro cuerpo se vuelve más susceptible a la inflamación, lo que puede acelerar el proceso de oxidación en la piel.
¿Cómo reducir el olor a viejito?
Aunque no es posible eliminar por completo el olor a viejito, hay algunas medidas que puedes tomar para reducir su intensidad:
Mantener una buena higiene
Ducharse o bañarse regularmente con un jabón suave y agua tibia puede ayudar a eliminar las bacterias y el exceso de aceite de la piel. También debes lavarte la ropa con regularidad para evitar que los olores se acumulen.
Hidratar la piel
Usar una crema hidratante o loción sin perfume puede ayudar a mantener la piel hidratada y reducir la producción de 2-nonenal. Busca productos que contengan ingredientes como ácido hialurónico, ceramidas o glicerina, que ayudan a retener la humedad.
Evitar los olores fuertes
Los olores fuertes, como el humo, los perfumes y los alimentos picantes, pueden agravar el olor a viejito. Intenta evitar estas sustancias y opta por usar desodorantes y antitranspirantes sin perfume.
Llevar una dieta saludable
Comer una dieta rica en frutas, verduras y cereales integrales puede ayudar a reducir el daño oxidativo y la inflamación en el cuerpo. Estos alimentos son ricos en antioxidantes, que neutralizan los radicales libres que pueden dañar la piel.
Hacer ejercicio regularmente
El ejercicio regular puede ayudar a mejorar la circulación y promover la renovación celular de la piel. Esto puede conducir a una piel más saludable y con un aroma más fresco.
Controlar los niveles de estrés
El estrés puede desencadenar la liberación de hormonas como el cortisol, que pueden aumentar la producción de 2-nonenal. Encontrar formas saludables de manejar el estrés, como el ejercicio, la meditación o el yoga, puede ayudar a reducir el olor a viejito.
En conclusión, el olor a viejito es un fenómeno natural que se produce a medida que envejecemos. Sin embargo, hay varias medidas que puedes tomar para reducir su intensidad, como mantener una buena higiene, hidratar la piel, evitar los olores fuertes, llevar una dieta saludable, hacer ejercicio regularmente y controlar los niveles de estrés.
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