Ataque a Trump: La jefa del Servicio Secreto asume responsabilidad y mantiene su puesto
Ante las críticas por las fallas de seguridad que permitieron el ataque a Donald Trump, la directora del Servicio Secreto de los Estados Unidos, Kimberly Cheatle, asumió su responsabilidad pero anunció que no renunciará.
Cheatle reconoce las fallas de seguridad
Cheatle calificó el intento de asesinato de "inaceptable" y expresó que ahora su prioridad es investigar las circunstancias que rodearon el ataque, asegurar que no se repita y garantizar los recursos necesarios para la investigación.
Admitió que identificar y neutralizar al sospechoso ocurrió en un corto período, lo que dificultó el proceso. Además, afirmó que la policía local tenía la responsabilidad de asegurar el edificio desde donde se realizaron los disparos antes de que un francotirador del Servicio Secreto abatiera al atacante.
Investigación en curso
Cheatle aseguró que el Servicio Secreto cooperará plenamente con la investigación independiente iniciada por el presidente Joe Biden y testificará ante los comités del Congreso.
El FBI sigue investigando los motivos del atacante de 20 años, analizando su teléfono y entrevistando a testigos. Aunque la investigación se encuentra en etapas tempranas, el FBI la considera terrorismo doméstico potencial.
Confianza en las medidas de seguridad
A pesar de las fallas de seguridad, Cheatle expresó su confianza en el plan de seguridad para la Convención Nacional Republicana que se llevará a cabo esta semana en Milwaukee.
"Soy la directora del Servicio Secreto y tengo que asegurarme de que estamos haciendo una investigación completa, y de que nuestro personal cuenta con todos los recursos necesarios para completarla", afirmó Cheatle.
Kimberly Cheatle, directora del Servicio Secreto de EE. UU.
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