Santa Cruz no habilitará puertos para la flota de pesca en la milla 201
``html
Recientemente, el Círculo de Políticas Ambientales (CPA) ha expresado su firme oposición a la idea de que Argentina habilite puertos para la flota china que se dedica a la pesca ilegal en el Atlántico sudoccidental. Esta declaración se produce tras las revelaciones de una funcionaria del Gobierno de Santa Cruz, que sugirió la posibilidad de ofrecer puertos a embarcaciones extranjeras que operan más allá de la Milla 200. La postura del CPA se basa en un documento emitido el año pasado que destaca los riesgos y consecuencias negativas de colaborar con barcos de pesca que operan de manera no regulada.
La posición del Círculo de Políticas Ambientales sobre la pesca ilegal
El CPA ha reiterado que Argentina no debe facilitar el uso de sus puertos a la flota pesquera china, que es conocida por sus prácticas depredadoras y criminales. Este grupo ha señalado que la flota de pesca china está asociada a actividades de pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR), así como a violaciones de derechos humanos. En años recientes, han surgido varias propuestas de diferentes sectores, incluidas del ámbito gubernamental, que buscan permitir que barcos de pesca de la República Popular China utilicen los puertos argentinos para su logística, lo que ha generado gran preocupación.
El CPA enfatiza que la flota pesquera china ha estado realizando incursiones ilegales en el Mar Argentino durante más de dos décadas. En 2001, se capturó el primer pesquero ilegal de bandera china en la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Argentina. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de las autoridades argentinas, estas incursiones han continuado, poniendo en riesgo la soberanía del país y sus recursos marinos. La situación ha sido descrita como alarmante, ya que no solo se trata de la pesca ilegal, sino también de la amenaza que representa para la vida de los tripulantes de la Prefectura Naval Argentina, quienes defienden los intereses nacionales en el mar.
Incursiones ilegales y sus consecuencias
Desde el CPA se ha destacado que la flota pesquera china opera frecuentemente con su Sistema Automático de Identificación (AIS) apagado, lo que dificulta su detección y sugiere actividades ilícitas. Esta táctica no solo representa un riesgo para la seguridad marítima, sino que también pone en evidencia la falta de transparencia en sus operaciones. El impacto negativo en el ecosistema marino es considerable, ya que estas embarcaciones operan sin regulación y sin la supervisión adecuada de observadores a bordo.
Según el CPA, la flota china, compuesta por más de 400 embarcaciones, realiza operaciones fuera de temporada y utiliza artes de pesca no reguladas. Esto incluye la captura intencionada de especies amenazadas, como elefantes marinos, delfines y tiburones. La magnitud de esta actividad depredadora plantea una amenaza real para el ecosistema marino en el Atlántico Sudoccidental, que se ve severamente afectado por estas prácticas.
Especies en peligro y la competencia desleal
Milko Schvartzman, responsable del programa de conservación y pesca del CPA, ha subrayado que es crucial recordar a las provincias del sur de Argentina por qué no se debe permitir que flotas de pesca INDNR utilicen puertos argentinos. En su informe, se menciona que muchas de las especies que son capturadas ilegalmente por la flota china son las mismas que son objeto de pesca por parte de la flota argentina, como el calamar (Illex Argentinus), que es la principal especie capturada por los barcos chinos.
Esto genera una competencia desleal no solo en el mar, sino también en los mercados internacionales, ya que la flota china no se adhiere a las normativas sanitarias, ambientales, laborales ni de seguridad que rigen para las embarcaciones argentinas. Además, estas embarcaciones chinas suelen recibir subsidios y no pagan impuestos, lo que impacta negativamente en la economía argentina y en el empleo local.
Adquisiciones y vínculos sospechosos
En los últimos años, se ha observado que varias compañías chinas han adquirido empresas argentinas, lo que les permite operar dentro de la ZEE. Esto ha generado inquietudes sobre los vínculos que estas empresas puedan tener con embarcaciones que han realizado incursiones ilegales en la ZEE o que están involucradas en la depredación de recursos marinos. El CPA ha instado a las autoridades a investigar estos vínculos y a establecer medidas claras para proteger los recursos marinos argentinos.
La preocupación sobre la pesca ilegal se amplía cuando se considera la falta de regulación y control sobre las actividades de estas embarcaciones. La realidad es que la pesca ilegal no solo afecta el ecosistema marino, sino que también impacta en la economía de las comunidades costeras que dependen de la pesca como medio de subsistencia. La competencia desleal de la flota china puede llevar a la disminución de las capturas y, por ende, a la pérdida de ingresos para los pescadores locales.
Violaciones a los derechos humanos en la pesca
El CPA también ha denunciado que la flota pesquera china está vinculada a violaciones a los derechos humanos. Las condiciones de trabajo de las tripulaciones son alarmantes, y muchos marineros, provenientes de países como Indonesia, Filipinas y naciones africanas, son sometidos a condiciones de semi-esclavitud. Se ha reportado que los cuerpos de estos marineros son descargados regularmente en puertos como Montevideo, Uruguay, lo que pone de manifiesto la gravedad de la situación.
China ocupa el primer lugar en el ranking global de pesca ilegal y, junto a Taiwán, lidera el ranking de esclavitud en la pesca. Esta realidad debe ser considerada por los gobiernos de Argentina y de las provincias costeras al momento de decidir sobre la habilitación de puertos para flotas extranjeras. Las implicaciones son profundas y afectan no solo el ecosistema marino, sino también la vida de miles de trabajadores que enfrentan condiciones inhumanas en alta mar.
Demandas del Círculo de Políticas Ambientales
Ante la situación actual, el CPA ha hecho un llamado urgente al gobierno nacional y a las autoridades provinciales para que no se habilite ningún puerto en territorio argentino que brinde servicios a flotas chinas de pesca INDNR o de cualquier otra bandera. La organización sostiene que es imperativo proteger los recursos marinos, los derechos humanos de los trabajadores y la seguridad de la navegación en las aguas argentinas.
La lucha contra la pesca ilegal requiere un esfuerzo conjunto de todos los sectores de la sociedad, incluidos los gobiernos, las organizaciones no gubernamentales y la comunidad en general. La concienciación sobre estos problemas es esencial para promover políticas efectivas que garanticen la sostenibilidad de los recursos marinos y la justicia social para los trabajadores del mar.
El daño al ecosistema marino, el impacto negativo en el empleo y la economía argentinos, los abusos a los derechos humanos de sus tripulaciones y la amenaza a la seguridad de la navegación son razones suficientes para prohibir el acceso a puertos argentinos a la flota pesquera china.
Posición del Círculo de Políticas Ambientales
``
Artículos relacionados