Armas improvisadas revelan crisis de artillería de Rusia
La guerra en Ucrania ha puesto de manifiesto las graves carencias de Rusia en materia de artillería, lo que le ha obligado a recurrir a medidas desesperadas, como el montaje de cañones BMP en carruajes.
El problema de la artillería rusa
Las fuerzas rusas se enfrentan a una grave escasez de artillería, lo que limita su capacidad ofensiva en el frente. Esta escasez se debe en parte a los ataques ucranianos contra los depósitos de armas y a la falta de efectivos para operar el equipo. Como resultado, Rusia está recurriendo a tácticas desesperadas, como el montaje de cañones BMP en carruajes. Sin embargo, estas armas improvisadas son ineficaces para ataques ofensivos o de largo alcance y sólo son adecuadas para la guerra de trincheras.
La inútil artillería norcoreana
Además de la escasez de artillería rusa, las fuerzas ucranianas también han criticado la calidad de la artillería norcoreana que ha recibido Rusia. El coronel Valentin Dykyi, portavoz militar ucraniano, ha calificado la artillería norcoreana de "totalmente deficiente", ya que "se remonta a los años 40 y 50" y es "potente pero lenta y difícil de manejar". Según Dykyi, Rusia está buscando soluciones alternativas para abordar su escasez de artillería, como el desarrollo de nuevas armas o la adquisición de equipo adicional de otros países.
Rusia en busca de soluciones
Ante la creciente presión de Ucrania, Rusia está explorando varias opciones para resolver su escasez de artillería. Se han filtrado imágenes de Rusia produciendo en masa armas improvisadas, como cañones BMP montados en carruajes. Estas armas improvisadas son una clara señal de la desesperación de Rusia y su incapacidad para producir suficiente artillería convencional. El hecho de que Rusia haya recurrido a medidas tan poco prácticas indica que se enfrenta a graves dificultades para mantener su capacidad ofensiva en el frente.
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