Castillo de Doña Urraca: Historia, Leyendas y Vino en Salvaterra de Miño
En el corazón de Galicia, donde la niebla se abraza a las montañas y la historia susurra entre las piedras, se alza el Castillo de Salvaterra de Miño, un bastión medieval que guarda secretos de reinas guerreras, intrigas dinásticas y batallas por el control de la frontera. Más que una simple fortaleza, Salvaterra es un testigo privilegiado de la Edad Media peninsular, un lugar donde la leyenda se entrelaza con la realidad y donde la figura de Urraca I, la primera reina de Europa, cobra vida. Este artículo te sumergirá en las profundidades de su historia, explorando sus murallas, sus leyendas y su transformación a lo largo de los siglos, hasta convertirse en un enclave cultural y enológico de primer orden.
El Castillo de Salvaterra: Un Baluarte Estratégico en la Frontera
El Castillo de Salvaterra de Miño, también conocido como Castillo de Doña Urraca, se erige como un imponente guardián de la frontera entre Galicia y Portugal. Su ubicación estratégica, en una colina que domina el valle del Miño, lo convirtió en un punto clave en las luchas medievales por el control del Condado Portucalense. Reconocido como Bien de Interés Cultural desde 1949, el castillo ha sido escenario de intensas contiendas bélicas, amores cortesanos y complejas conspiraciones dinásticas. Su historia se remonta a los siglos X y XI, aunque ha sido objeto de numerosas transformaciones a lo largo del tiempo, adaptándose a las necesidades defensivas de cada época.
La fortaleza original, construida probablemente sobre vestigios de un asentamiento romano, fue fortificada en el siglo XII por orden de Alfonso VII, hijo de Urraca I. Sin embargo, fue durante la Guerra de Restauración portuguesa, en el siglo XVII, cuando el castillo experimentó su mayor transformación. El ingeniero francés Carlos de Lessar fue encargado de reforzar sus defensas, dotándolo de robustos muros de sillería granítica, bóvedas de ladrillo y arcos de medio punto, convirtiéndolo en una verdadera plaza fuerte.
Urraca I: La Reina Guerrera de Salvaterra
Urraca I de León y Castilla (1081-1126) es, sin duda, la figura más emblemática asociada al Castillo de Salvaterra. Heredera de los reinos de León y Castilla tras la muerte de su padre, Alfonso VI, en 1109, Urraca se enfrentó a numerosos desafíos para consolidar su poder. Su matrimonio con Alfonso I, rey de Aragón y Navarra, fue un intento de fortalecer su posición, pero la relación se deterioró rápidamente, dando lugar a una guerra civil que dividió la península ibérica. Salvaterra se convirtió en uno de sus principales bastiones estratégicos en las contiendas por el control del Condado Portucalense, una región clave en la lucha por la independencia de Portugal.
Urraca forjó su reputación de guerrera astuta y gobernante implacable en las murallas de Salvaterra. Los relatos populares recogen sus huidas por túneles secretos en Sobroso y Lobeira, su famoso lanzamiento de la corona a un pozo para que no cayera en manos enemigas, o su paso por la Torre de Doña Urraca en Caldas de Reis, donde dio a luz a Alfonso VII. Estas historias, aunque envueltas en el halo de la leyenda, reflejan la determinación y el coraje de una reina que se enfrentó a un mundo dominado por hombres y que luchó por mantener su trono a toda costa.
La Arquitectura del Castillo: Un Viaje a Través del Tiempo
La arquitectura del Castillo de Salvaterra de Miño es un reflejo de su larga y accidentada historia. La fortaleza presenta una planta irregular, adaptada a la orografía del terreno. Sus murallas, construidas con robusta sillería granítica, se alzan sobre un promontorio rocoso, ofreciendo una vista panorámica del valle del Miño. En su interior, se pueden apreciar diferentes elementos arquitectónicos que corresponden a distintas épocas. Destacan las torres almenadas, los cubos de vigilancia y las puertas fortificadas, que testimonian la importancia estratégica del castillo a lo largo de los siglos.
La remodelación llevada a cabo por Carlos de Lessar en el siglo XVII introdujo elementos propios de la arquitectura militar de la época, como las bóvedas de ladrillo y los arcos de medio punto. Sin embargo, se respetaron algunos elementos originales, como la torre del homenaje, que data del siglo XII. En 2008, concluyeron las últimas restauraciones de las murallas, devolviendo al conjunto su aspecto defensivo original. Estas obras permitieron recuperar la belleza y la majestuosidad de una fortaleza que ha resistido el paso del tiempo.
Leyendas y Misterios de Salvaterra
El Castillo de Salvaterra de Miño está envuelto en un aura de misterio y leyenda. Bajo sus suelos, un pozo alimenta la imaginación popular: se dice que enlaza con un túnel secreto que llegaba hasta Monção, en la orilla portuguesa del Miño. Este túnel, según la tradición, era utilizado por Urraca I para escapar de sus enemigos o para comunicarse en secreto con sus aliados. Aunque nunca se ha encontrado evidencia concluyente de la existencia de este túnel, la leyenda persiste, alimentando la fascinación por el castillo.
Otra de las leyendas más populares cuenta que Urraca I, ante el temor de que su corona cayera en manos enemigas, la arrojó a un pozo cercano al castillo. La corona, según la leyenda, nunca fue recuperada y permanece oculta en las profundidades del pozo, esperando ser descubierta por un afortunado aventurero. Estas historias, transmitidas de generación en generación, contribuyen a crear un ambiente mágico y enigmático alrededor del castillo.
Salvaterra Hoy: Un Centro Cultural y Enológico
En la actualidad, el Castillo de Salvaterra de Miño ha experimentado una transformación que lo ha convertido en un importante centro cultural y enológico. En su interior, se alberga el Centro de Interpretación del Vino de la Comarca del Miño, un espacio que pone en valor la tradición vitivinícola de la región. Este centro ofrece a los visitantes la oportunidad de conocer el proceso de elaboración del vino, desde la viña hasta la botella, y de degustar los vinos de la comarca.
Además de las exposiciones permanentes y las degustaciones de vino, el castillo acoge numerosos eventos culturales a lo largo del año, como conciertos, representaciones teatrales y ferias artesanales. Estos eventos contribuyen a dinamizar la vida cultural de la comarca y a atraer a visitantes de todo el mundo. Salvaterra de Miño reivindica el legado de su fortaleza como punto de encuentro entre historia, mito y paisaje, ofreciendo a sus visitantes una experiencia única e inolvidable.
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