Cocina palestina en Nochebuena: Delicada paradoja entre riqueza y hambre
En esta Nochebuena, la cocina palestina nos recuerda la paradoja de Belén, donde el alumbramiento de Jesús se ve ensombrecido por la ocupación israelí y el hambre en Gaza. El chef francopalestino Fadi Kattan nos brinda un menú palestino festivo, pero también un llamado a la solidaridad y la humanidad.
La Cocina Palestina: Un Crisol de Culturas
La cocina palestina es un reflejo de la diversidad geográfica y cultural del país, desde los pescados mediterráneos hasta los productos desérticos beduinos. Su ubicación en el cruce de rutas comerciales ha enriquecido su gastronomía con especias asiáticas, café yemení y vinos de Jericó. A pesar de los conflictos continuos, la cocina palestina sigue evolucionando fusionando tradiciones antiguas con influencias modernas.
El chef Kattan sugiere un menú festivo que celebra la abundancia de la cocina palestina, utilizando productos locales y recetas transmitidas de generación en generación. El menú incluye:
* Kibbeh: Plato tradicional de carne picada mezclada con trigo bulgur, especias y cebolla. * Maqluba: Arroz cocido al vapor con capas de verduras, carne y especias. * Mansaf: cordero cocido a fuego lento en una salsa de yogur seco y servido con arroz. * Kunafa: Postre hecho con fideos finos empapados en almíbar y rellenos con queso o nueces.
La Paradoja de Gaza
Mientras en Belén se celebra la abundancia, en la Franja de Gaza el hambre asola al 96% de la población, según Naciones Unidas. El bloqueo israelí impide la entrada de alimentos y otras necesidades básicas, creando una crisis humanitaria desgarradora. La comunidad internacional ha permanecido en silencio ante esta tragedia, lamentó Kattan.
"Es importante que recordemos la situación de Gaza y las dificultades que enfrenta el pueblo palestino", dijo Kattan. "Debemos añadir humanidad y solidaridad a nuestras cestas de la compra, apoyando a Palestina y a quienes no pueden comer a la vuelta de la esquina".
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