Conflicto Pesquero en Chubut: Fracaso de la Reunión y Protestas Intensificadas
La calma chicha en Puerto Madryn es una fachada. Bajo la superficie, un conflicto pesquero de creciente intensidad paraliza la actividad de la flota congeladora tangonera, sumiendo a la ciudad en una incertidumbre económica y social palpable. La semana comienza con un fracaso rotundo en las negociaciones, evidenciando una profunda fractura entre los actores involucrados y la ausencia de una figura clave: el gobernador Ignacio Torres. Este artículo desentraña las complejidades de esta crisis, analizando las tensiones sindicales, las estrategias gubernamentales y el impacto en la comunidad portuaria.
- El Conflicto Pesquero: Orígenes y Demandas
- El Fracaso de la Reunión de Urgencia y la Ausencia del Gobernador
- La Fractura Sindical: SOMU y SUPA en Disputa
- Escalada de las Protestas: Cortes de Ruta y Concentraciones
- La Estrategia Gubernamental: Contención y Negociación en Buenos Aires
- El Impacto Económico y Social del Conflicto
- El Rol de las Empresas Pesqueras y la Distribución de Cuotas
El Conflicto Pesquero: Orígenes y Demandas
El conflicto se centra en las cuotas de captura de merluza negra, un recurso fundamental para la industria pesquera de la región. Los sindicatos, principalmente el Sindicato de Obreros Marítimos (SOMU) y el Sindicato de Trabajadores de la Industria Alimentaria (STIA), exigen una mayor distribución de las cuotas para garantizar el empleo y la sostenibilidad de la actividad. Argumentan que las empresas pesqueras, concentradas en pocas manos, acaparan la mayor parte del recurso, dejando a los trabajadores y a las flotas más pequeñas en una situación precaria. Las demandas incluyen también mejoras en las condiciones laborales y la revisión de los acuerdos comerciales que consideran desfavorables para la provincia de Chubut.
La situación se agrava por la percepción de falta de transparencia en la asignación de las cuotas. Los sindicatos denuncian favoritismos y la influencia de intereses económicos poderosos en las decisiones gubernamentales. Esta desconfianza ha erosionado la relación entre los trabajadores y las autoridades, dificultando el diálogo y la búsqueda de soluciones. La crisis actual es, en gran medida, el resultado de años de tensiones acumuladas y la falta de una política pesquera clara y equitativa.
El Fracaso de la Reunión de Urgencia y la Ausencia del Gobernador
La reunión convocada por el Gobierno de Chubut, con la intención de desactivar la crisis, se convirtió en un fiasco debido a la ausencia del gobernador Ignacio Torres. El cambio de sede, desde la Municipalidad de Puerto Madryn a un salón de usos múltiples de la Administración Portuaria, ya fue un indicio de la falta de importancia que se le estaba dando al encuentro. La presencia de los secretarios de Pesca y Trabajo, Andrés Arbeletche y Nicolás Zárate, respectivamente, no fue suficiente para compensar la falta de la máxima autoridad provincial.
La ausencia del gobernador Torres fue interpretada por los sindicatos como una falta de respeto y una señal de que el gobierno no estaba dispuesto a tomar en serio sus demandas. Los representantes del SOMU y el STIA se retiraron de la reunión tras apenas media hora, dejando claro que no participarían en un diálogo sin la presencia del gobernador. Esta decisión marcó un punto de inflexión en el conflicto, radicalizando las posiciones y dificultando aún más la posibilidad de llegar a un acuerdo.
La Fractura Sindical: SOMU y SUPA en Disputa
La unidad sindical, fundamental para ejercer presión sobre el gobierno y las empresas pesqueras, se ha resquebrajado. El Sindicato Unido de Portuarios Argentinos (SUPA) tomó distancia de la convocatoria a la manifestación masiva del viernes, luego de que trascendieran audios en los que dirigentes del SOMU amenazaban con un corte de ruta por tiempo indeterminado y con interrumpir la operatoria de la empresa Aluar. Esta desinteligencia provocó que el SUPA optara por no participar en la reunión del lunes ni en las protestas.
La decisión del SUPA de distanciarse del SOMU refleja una profunda desconfianza y una disputa por el liderazgo en la representación de los trabajadores portuarios. Algunos dirigentes del SUPA consideran que las acciones del SOMU son demasiado radicales y podrían perjudicar a los trabajadores y a la economía de la región. Dentro del SOMU, por su parte, existe un creciente malestar por las deficiencias en la conducción y la falta de un rumbo claro. Esta división interna debilita la capacidad de negociación de los sindicatos y complica la búsqueda de una solución al conflicto.
Escalada de las Protestas: Cortes de Ruta y Concentraciones
Ante el fracaso de las negociaciones y la fractura sindical, las protestas se han intensificado. Marineros iniciaron concentraciones en diferentes puntos de Puerto Madryn, bloqueando el acceso principal al muelle Storni y la Ruta 3. Los sectores más combativos del SOMU alientan a cortar todos los accesos a la ciudad, e incluso a provocar una intervención de la Gendarmería Nacional, con la esperanza de que el gobierno nacional se haga cargo del conflicto.
Esta estrategia, aunque arriesgada, busca visibilizar la gravedad de la situación y presionar al gobierno para que tome medidas urgentes. Los dirigentes del SOMU consideran que la nacionalización del conflicto es la única forma de garantizar que se escuchen sus demandas y se llegue a una solución justa. Sin embargo, esta táctica también podría tener consecuencias negativas, como la represión policial y el agravamiento de la crisis económica y social.
La Estrategia Gubernamental: Contención y Negociación en Buenos Aires
El Gobierno de Chubut, a través de los secretarios de Pesca y Trabajo, ha intentado contener la situación y evitar que se corten las rutas. Los funcionarios llegaron a Puerto Madryn con instrucciones del gobernador Torres de gestionar reuniones en Buenos Aires con representantes del gobierno nacional y de las empresas pesqueras. El objetivo es buscar un acuerdo que permita desbloquear el conflicto y garantizar la continuidad de la actividad pesquera.
Sin embargo, la estrategia gubernamental se ha visto frustrada por la ausencia del gobernador Torres y la radicalización de las posiciones sindicales. La falta de un liderazgo provincial fuerte y la desconfianza de los sindicatos han dificultado la negociación y han prolongado la crisis. El gobierno enfrenta el desafío de encontrar un equilibrio entre la defensa de los intereses de la provincia y la necesidad de garantizar la estabilidad económica y social.
La paralización de la flota congeladora tangonera tiene un impacto devastador en la economía de Puerto Madryn y en la de toda la provincia de Chubut. La industria pesquera es una fuente importante de empleo y de ingresos para la región, y su inactividad genera pérdidas millonarias y pone en riesgo el sustento de miles de familias. Los comercios locales, los hoteles y los restaurantes también se ven afectados por la falta de actividad turística y la disminución del poder adquisitivo.
El conflicto también tiene consecuencias sociales graves. La incertidumbre económica y la falta de empleo generan angustia y desesperación en la comunidad. Las protestas y los cortes de ruta dificultan la vida cotidiana de los habitantes de Puerto Madryn y generan tensiones sociales. La falta de diálogo y la polarización política agravan la situación y dificultan la búsqueda de soluciones.
El Rol de las Empresas Pesqueras y la Distribución de Cuotas
Las empresas pesqueras, acusadas por los sindicatos de acaparar la mayor parte de las cuotas de captura, se mantienen en silencio y evitan hacer declaraciones públicas. Algunas empresas han intentado negociar directamente con los sindicatos, pero sin éxito. La falta de transparencia en la asignación de las cuotas y la concentración del recurso en pocas manos son los principales puntos de conflicto.
Los sindicatos exigen una revisión del sistema de distribución de cuotas, que consideran injusto y perjudicial para los trabajadores y las flotas más pequeñas. Proponen un sistema más equitativo, que tenga en cuenta el número de trabajadores, la capacidad de las embarcaciones y la sostenibilidad del recurso. La solución a este conflicto pasa, inevitablemente, por una negociación transparente y honesta entre el gobierno, las empresas pesqueras y los sindicatos.
Fuente: https://partedepesca.com.ar/d/fracaso-la-reunion-y-crece-la-tension-en-puerto-madryn/
Artículos relacionados