Desfile del 9 de Julio en Neuquén: Orgullo y sentimiento patriótico en las calles
En las calles de Neuquén, el 9 de julio se vistió de celeste y blanco, enarbolando el orgullo patrio con un vibrante desfile cívico militar que colmó de emoción a los presentes.
El Renacer de la Tradición
Tras un paréntesis de siete años, el tradicional desfile por el Día de la Independencia volvió a las calles neuquinas, evocando la gesta de los próceres de la Patria.
Comenzando a las 15 horas en la intersección de Sarmiento y Mitre, el despliegue de fuerzas de seguridad, escuelas y agrupaciones gauchas cautivó la mirada de los espectadores que se congregaron desde el mediodía.
Un Tapiz de Presencias
El recorrido del desfile, de oeste a este, congregó a representantes de los distintos estamentos de la sociedad neuquina, uniendo generaciones y orígenes en un espíritu de celebración compartida.
Además de las fuerzas militares y policiales, desfilaron estudiantes, gauchos y veteranos de guerra, entre otros.
Un Palco de Honor
Frente al cenotafio de los Caídos en Malvinas, un palco oficial acogió a las autoridades provinciales, encabezadas por el gobernador Rolando Figueroa.
Desde allí, los funcionarios presenciaron el desfile y homenajearon a quienes dieron su vida por la Patria.
El Celeste y Blanco en Cada Mano
Miles de neuquinos se reunieron a lo largo del predio en la calle Sarmiento, ondeando banderas celestes y blancas con entusiasmo desbordante.
El fervor patriótico se hizo palpable en cada aplauso y grito de aliento, testimoniando el arraigo y el amor por la tierra que nos une.
El Orgullo de un Gobernador
El gobernador Rolando Figueroa se mostró profundamente emocionado por la magnitud del desfile y el sentir patriótico que se respiró en el ambiente.
"Anoche en Tucumán, uno se llena de ese sentir patriótico. Era importante tener este desfile, tener este abrazo con los vecinos de Neuquén", expresó Figueroa.
Rolando Figueroa, Gobernador de Neuquén
El Legado de los Héroes
Figueroa rememoró la lucha y los sacrificios de los gestores de la Independencia, destacando la figura de San Martín, Belgrano y Güemes como símbolos de valor y determinación.
"Más allá del recuerdo, es importante este sentimiento patriótico, y siempre recordar ese grito de viva la Independencia, viva la Patria", enfatizó.
Dejando Huella
El desfile por el 9 de julio en Neuquén no solo fue un despliegue de fuerzas militares y civiles; fue un testimonio vibrante del espíritu patriótico que une a los argentinos.
Cada bandera ondeada, cada aplauso y cada grito de aliento dejó una huella indeleble en los corazones de los presentes, fortaleciendo el orgullo y el amor por la Patria.
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