Desmantelan Red de Narcotráfico: Secuestran Cocaína, Oro y Detienen Pilotos en Argentina.
En enero de 2025, una operación conjunta entre la Policía de Entre Ríos y Gendarmería Nacional desmanteló una sofisticada red de narcotráfico que operaba a través de avionetas cargadas con cocaína. El incidente inicial, con el aterrizaje de una Cessna 210 en Ibicuy, fue solo la punta del iceberg de una investigación que reveló una compleja logística destinada a evadir la identificación de la aeronave y sus responsables. Este artículo detalla el desarrollo de la investigación, los hallazgos clave durante los allanamientos y la detención de individuos clave en la organización criminal, exponiendo la magnitud de la operación y las estrategias empleadas por los narcotraficantes.
- El Aterrizaje en Ibicuy: El Inicio de la Investigación
- Desentrañando la Logística: El Rol de Gendarmería y la Inteligencia Criminal
- Los Allanamientos: Un Botín de Evidencia Incautada
- Tecnología y Comunicación: Las Herramientas de la Organización Criminal
- La Detención del Piloto Peruano: Un Enlace Clave en la Logística
El Aterrizaje en Ibicuy: El Inicio de la Investigación
El 1 de enero de 2025, la tranquilidad de Ibicuy, una localidad entrerriana a orillas del río Paraná, se vio interrumpida por el aterrizaje de una avioneta Cessna 210 de matrícula desconocida. La rápida respuesta de la Policía de Entre Ríos, en colaboración con personal de Gendarmería Nacional, permitió la detención del piloto, un ciudadano brasileño, y su acompañante. El hallazgo de 358 kilogramos de cocaína a bordo de la aeronave desencadenó una investigación federal a cargo del Juzgado Federal de Gualeguaychú, la Fiscalía Federal y la PROCUNAR (Procuración de Criminalidad Económica y Lavado de Activos). La magnitud del cargamento y las circunstancias del aterrizaje sugirieron de inmediato la existencia de una organización criminal con recursos considerables y una planificación meticulosa.
La prioridad inicial fue determinar el origen de la avioneta y la identidad de los responsables de la logística. Se sospechaba que la aeronave había sido modificada para dificultar su rastreo y que se habían tomado medidas para borrar cualquier rastro que pudiera conducir a la organización detrás del envío. La colaboración entre las fuerzas de seguridad y los organismos judiciales fue fundamental para avanzar en la investigación y desentrañar la red de conexiones que sustentaba la operación.
Desentrañando la Logística: El Rol de Gendarmería y la Inteligencia Criminal
El Escuadrón de Operaciones Antidrogas y la Unidad de Inteligencia Criminal “Gualeguaychú” de Gendarmería Nacional asumieron un papel crucial en la investigación. Sus especialistas se dedicaron a analizar exhaustivamente la avioneta, sus componentes y la documentación relacionada. El objetivo era reconstruir la trayectoria de la aeronave, identificar a sus propietarios y determinar cómo había logrado evadir los controles de tránsito aéreo. Los trabajos analíticos y periciales revelaron que la organización criminal había empleado diversas estrategias para ocultar la identidad de la avioneta, incluyendo la manipulación de la matrícula y la eliminación de registros.
Una vez que se logró establecer la matrícula original de la avioneta y su origen, el magistrado interviniente autorizó una serie de allanamientos en diferentes puntos del país. La información recopilada por la Unidad de Inteligencia Criminal fue clave para identificar las propiedades vinculadas a la organización y justificar las medidas judiciales. La investigación se centró en desmantelar la estructura logística que permitía el ingreso de la droga al país y su posterior distribución.
Los Allanamientos: Un Botín de Evidencia Incautada
Se llevaron a cabo seis allanamientos simultáneos: cuatro en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y dos en Carlos Casares, provincia de Buenos Aires. Las inspecciones, realizadas por personal de Gendarmería Nacional, resultaron en el decomiso de una cantidad significativa de evidencia que permitió profundizar la investigación y avanzar en la identificación de los responsables. Entre los elementos incautados se encontraban un simulador de vuelo, utilizado presumiblemente para entrenar a los pilotos involucrados en la operación; lingotes, joyas y monedas de oro, con un valor considerable en el mercado y potencialmente utilizados para el lavado de dinero; y 5 kilogramos de cocaína, distribuida en paquetes y dosis fraccionadas.
La cantidad de dinero incautada también fue notable: más de 500.000 dólares estadounidenses, junto con contadoras de billetes, sugiriendo una operación con un alto volumen de transacciones financieras. Además, se encontraron más de 6.000 municiones de distintos calibres, lo que indicaba que la organización estaba preparada para defenderse en caso de ser confrontada por las fuerzas de seguridad. La diversidad de la evidencia incautada demostró la complejidad de la red criminal y su capacidad para operar en múltiples niveles.
Tecnología y Comunicación: Las Herramientas de la Organización Criminal
Los allanamientos también revelaron la sofisticación tecnológica empleada por la organización criminal. Se encontraron transceptores de VHF, utilizados para establecer la comunicación entre el piloto de la aeronave y el receptor en tierra, facilitando la coordinación del aterrizaje y la descarga de la droga. Asimismo, se decomisó telefonía satelital y celular, herramientas esenciales para mantener la comunicación segura y evadir el rastreo de las autoridades. La utilización de estos medios de comunicación encriptados dificultaba la interceptación de las comunicaciones y protegía a los miembros de la organización.
Además, se incautó documentación de la aeronave secuestrada, así como partes de la avioneta que habían sido extraídas para evitar su identificación. Esta evidencia confirmó las sospechas de que la organización había intentado borrar cualquier rastro que pudiera conducir a su identificación. La meticulosidad con la que se habían tomado estas medidas demostró el nivel de planificación y la experiencia de los responsables.
La Detención del Piloto Peruano: Un Enlace Clave en la Logística
La investigación no se detuvo con los allanamientos y el decomiso de evidencia. Los gendarmes continuaron trabajando en el análisis de la información recopilada y en la identificación de los miembros clave de la organización. Como resultado de estas investigaciones, se logró detener a un piloto de nacionalidad peruana que había participado en la logística para el traslado de la avioneta con los 358 kilogramos de cocaína. Su testimonio y la información que proporcionó fueron fundamentales para completar el rompecabezas y comprender la estructura de la red criminal.
La detención del piloto peruano representó un golpe significativo para la organización, ya que era un enlace clave en la cadena de suministro. Su conocimiento de las rutas aéreas, los procedimientos de vuelo y los contactos en el mundo del narcotráfico lo convertían en un activo valioso para la organización. Su colaboración con las autoridades permitió identificar a otros miembros de la red y desmantelar parte de su infraestructura logística.
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