El asalto de la ultraderecha al corazón de Europa: Amenaza a Schengen y al asilo
En plena campaña electoral alemana, la derecha y la ultraderecha han unido fuerzas para suspender el espacio Schengen y el derecho de asilo europeo. Esta medida, aprobada por el Bundestag el 30 de enero, supone un grave retroceso en la integración europea y la primera vez desde el fin de la II Guerra Mundial que una formación neonazi se convierte en un actor decisivo en la política alemana.
Implicaciones para Schengen
La suspensión de Schengen socava uno de los logros más preciados de la UE: la libre circulación de personas sin fronteras interiores. Esta medida unilateral, que contraviene el Derecho europeo, amenaza con desencadenar una reacción en cadena en otros Estados miembros, creando un efecto dominó que podría desmantelar Schengen. La suspensión de controles fronterizos permanentes y la denegación de asilo en las fronteras alemanas son medidas claramente antieuropeas que pondrían en peligro la integración y la confianza mutua entre los Estados miembros.
Violación de los derechos humanos y del Derecho europeo
La propuesta de la CDU/CSU también viola los derechos humanos y el Derecho europeo. El asilo es un derecho fundamental consagrado en el Derecho europeo, y la negativa de Alemania a conceder asilo a los solicitantes en su frontera vulnera este principio. Además, la suspensión de Schengen sin autorización previa de la Comisión Europea es contraria al Derecho europeo y socava la primacía del Derecho de la UE.
Necesidad de cooperación europea
Para evitar que la Agenda neofascista de la derecha y la ultraderecha alemana socave la UE, los Estados miembros deben aplicar plenamente las normas revisadas de Schengen. Las medidas nacionales de restablecimiento de controles fronterizos deben ser una medida de último recurso y su necesidad y proporcionalidad deben ser cuidadosamente evaluadas. La cooperación europea es esencial para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos europeos, y la suspensión unilateral de Schengen no es la solución a los retos migratorios.
El retroceso de Alemania: Un paso hacia el pasado
La decisión de Alemania de suspender Schengen es un peligroso retroceso que pone en peligro los principios fundamentales de la UE. Representa un retorno a las políticas nacionalistas que dividieron Europa en el pasado y amenaza con socavar la integración y la cooperación que han hecho de la UE una fuerza para la paz y la prosperidad en el mundo.
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