El carry-trade: El talismán de Caputo para enfrentar la fuga de dólares
Luis Caputo se aferra a la carry-trade, un dios cruel pero cuya generosidad sólo dura mientras persistan los flujos financieros a corto plazo. Esta vez, el ministro de Economía se apoya en la bicicleta financiera con las rueditas del cepo cambiario.
El carry-trade y las rueditas
A diferencia de su etapa anterior con Mauricio Macri, Caputo ahora cuenta con las rueditas del cepo cambiario para estabilizar la bicicleta financiera. Sin embargo, a pesar de la simpatía política de la élite corporativa hacia el programa de la ultraderecha, la incertidumbre y la depresión del mercado interno prevalecen. Como resultado, las multinacionales que encuentran compradores se deshacen de sus filiales en Argentina.
La fuga de los bonos
La aprobación de la Ley de Bases no pudo contener la ansiedad de los CEO y traders. De repente, dejaron de creer en la ley y huyeron masivamente de los bonos de la deuda. La disparada del dólar y la brecha entre el oficial y los paralelos dañan la esperanza de un futuro mejor para las víctimas de un presente asfixiante. La Casa Rosada se ve atribulada por dudas y deudas, como se evidenció en la jura de Federico Sturzenegger.
Los dogmas y el cepo cambiario
Contra las advertencias de expertos, Caputo se aferra al "crawling peg" del 2% mensual y al ancla cambiaria para frenar la inflación. Aunque ello requiera asfixiar la economía. Caputo apuesta a que los dólares paralelos se mantengan estables gracias al ingreso de "hot money". La "emisión cero" y la ratificación del "blend" buscan convencer a los capitales golondrina de que la brecha no crecerá más.
El riesgo del exceso de pesos
Si la emisión cero se mantiene, el riesgo país disminuirá y permitirá renegociar la deuda "a mercado". Las rueditas del cepo evitarían que una posible corrida afecte al dólar oficial y a los precios. Sin embargo, existe un riesgo adicional: el "exceso de pesos" no ha desaparecido, sino que ha cambiado de bolsillo. La deuda sigue siendo de muy corto plazo y tiene un mercado secundario. Un riesgo de impago podría derivar en un riesgo de crisis cambiaria.
Divorcios contenciosos
Federico Sturzenegger se queja de la falta de consensos entre los economistas. El economista Orlando Ferreres advirtió sobre una posible "especie de Bonex para los bancos". El riesgo de impago se cierne sobre el sistema financiero.
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