El dilema de Milei: ¿Atraso cambiario o un plan diferente?
En medio de un escenario económico desafiante, el presidente Javier Milei ha puesto el foco en la batalla cultural contra la noción de un atraso cambiario, percibiendo esta percepción como una amenaza para su plan económico. A pesar de los esfuerzos del gobierno por defender su postura, las preocupaciones sobre la sostenibilidad del tipo de cambio fijo han ganado terreno, lo que lleva a Milei a arremeter contra los "economochantas" y a reiterar su confianza en su estrategia.
La batalla contra el atraso cambiario
Milei sostiene que no está interesado en ganar competitividad a través de la devaluación, confiando en que la apertura comercial y la "deflación en dólares" impulsada por las importaciones compensarán cualquier percepción de atraso cambiario. Su ministro de Economía, Toto Caputo, ha defendido el auge de los viajes al extranjero de los argentinos como prueba de la riqueza de la nación.
Sin embargo, los asesores del gobierno han argumentado que el plan de "tres anclas" -fiscal, monetaria y cambiaria- es único y no se parece a las experiencias históricas fallidas. A pesar de estas garantías, las dudas sobre la sostenibilidad del tipo de cambio fijo persisten.
El FMI y el "desafío" cambiario
El reciente comunicado del Fondo Monetario Internacional (FMI) tras su misión técnica en Buenos Aires sugiere que la preocupación por el tipo de cambio persiste entre los funcionarios del organismo, a pesar de los elogios a los avances en materia de inflación. Las autoridades del FMI consideran que el modelo económico enfrenta "desafíos" que requieren una mayor coordinación fiscal, monetaria y cambiaria.
Si bien el FMI reconoce que no espera una flexibilización del cepo cambiario en un año electoral, su acuerdo con Argentina no implicará la liberación de nuevos fondos. La esperanza de un acuerdo a corto plazo se ve empañada por la insistencia del FMI en abordar el problema cambiario.
Esperanza en la oleada de dólares
Frente a la creciente presión, Milei confía en una futura oleada de dólares para aliviar la escasez de divisas. Su plan prevé la eliminación de los controles cambiarios en 2026, pero el FMI advierte que el déficit de cuenta corriente y las reservas netas negativas del Banco Central representan riesgos significativos para la sostenibilidad del tipo de cambio fijo.
Esta apreciación representa un riesgo significativo para el programa de estabilización basado en el tipo de cambio, especialmente considerando las reservas netas negativas del Banco Central y la lenta acumulación de reservas internacionales.
Alejandro Werner, ex director del FMI
Las críticas de expertos internacionales y ex funcionarios como Domingo Cavallo añaden peso a las preocupaciones sobre el atraso cambiario y el posible riesgo de una devaluación.
La defensa de Milei
A pesar de los desafíos, Milei se mantiene firme en su rechazo a una devaluación, argumentando que sería un error volver a las políticas económicas fallidas del pasado. Mantiene que su plan está diseñado para estabilizar la economía, reducir la inflación y sentar las bases para un crecimiento sostenible.
El presidente ha acusado a los críticos de su plan de estar motivados por intereses políticos y de no comprender la complejidad de la actual situación económica. También ha expresado su confianza en que su enfoque será exitoso a largo plazo.
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