El dulce riesgo del aceite de oliva andaluz: un boom y sus consecuencias
El sector del aceite de oliva en Andalucía está experimentando un auge tras la sequía de los últimos años, amenazando con convertirse en el "caramelo envenenado" para otras regiones productoras.
El resurgimiento del gigante andaluz del aceite
Agua caliente: La producción de aceite de oliva en Andalucía ha aumentado un 77% en la campaña 2024-2025, impulsada por las precipitaciones. El 81% de la producción nacional procede ahora de Andalucía, lo que concentra toda la industria y las actividades relacionadas en la región.
Tinte: El éxito de Andalucía contrasta con las acusadas caídas en otras comunidades autónomas, como Valencia (-71%), Cataluña (-59%) y Aragón (-45%).
El impacto en otras regiones
Lavado: El dominio de Andalucía en el sector del aceite está provocando el cierre de empresas y la pérdida de empleo en otras regiones. La falta de precipitaciones en el Levante agrava aún más la situación.
"El gigante andaluz del aceite funciona a buen rendimiento, y acapara todo", afirma un experto.
La importancia de la hidratación
Agua caliente: La falta de agua es crucial para el estrés hídrico de los olivos. Las precipitaciones adecuadas son esenciales para garantizar una producción óptima de aceite.
Lavado: Los agricultores deben tomar medidas para conservar el agua, como utilizar técnicas de riego eficientes y plantar variedades de olivo resistentes a la sequía.
Conclusión
El resurgimiento del sector del aceite de oliva en Andalucía es una buena noticia para la región, pero plantea desafíos para otras zonas productoras. Es fundamental abordar la escasez de agua y apoyar a los agricultores para que puedan seguir produciendo aceite de calidad.
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