El papel de las escuelas en las elecciones primarias republicanas
Hablar sobre las escuelas es una línea de aplauso confiable para los candidatos republicanos. En Cedar Rapids, Iowa, el ex presidente Donald Trump recibió un rugido de aprobación cuando habló sobre raza y sexualidad en las escuelas. "El primer día, firmaré una nueva orden ejecutiva para recortar la financiación federal para cualquier escuela que promueva la teoría crítica de la raza, la locura transgénero y otro contenido inapropiado racial, sexual o político en nuestros niños", prometió. Las escuelas son aún más centrales para la campaña del gobernador de Florida, Ron DeSantis, y utilizó el tema para animar a la multitud en noviembre en el restaurante Machine Shed en Davenport, Iowa. "Como padre de un niño de seis, cinco y tres años, creo que los niños deberían poder ir a la escuela, ver dibujos animados, simplemente ser niños sin que les impongan una agenda", dijo entre aplausos. El tema de cómo se enseña el género y la raza en las escuelas ha sido un foco importante para los candidatos republicanos durante todo el ciclo de campaña, incluso cuando el tema puede no impulsar realmente los votos. De hecho, es difícil saber realmente cuánto les importa a los votantes el tema. Cuando los encuestadores preguntan a los votantes republicanos cuáles son sus prioridades principales, la economía tiende a estar en primer lugar. La inmigración también está ahí arriba. A veces, la política exterior. A menudo, la educación está en la parte inferior, si es que se clasifica en absoluto. "La gente confunde los gritos con las prioridades. Confunden la pasión con la priorización", dijo Frank Luntz, estratega republicano que ha realizado muchos grupos de enfoque de votantes. "Sí, los transgénero y todo eso hace que la gente grite. Pero eso no es lo que realmente les importa", agregó. En primer lugar, una distinción importante en esta primaria es que hablar sobre las escuelas y hablar sobre la educación a menudo son cosas diferentes. Gran parte de la retórica de la campaña republicana no ha sido sobre el logro estudiantil, la elección de escuelas o las pruebas estandarizadas. Más bien, se trata de librar guerras culturales en el campo de batalla de las escuelas de K-12. Y aunque eso puede no ser el problema que impulsa a los votantes hacia un candidato u otro, las escuelas desempeñan un papel importante para los candidatos.
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