El peculiar aroma de los adultos mayores: evidencia científica
El olor característico de las personas mayores es un fenómeno comprobado científicamente, no solo una percepción subjetiva. Los estudios han demostrado que los humanos pueden discernir la edad de una persona basándose únicamente en su olor corporal.
Un olfato afinado
Según un estudio de 2012 publicado en Plos One, los voluntarios pudieron calificar con precisión la edad de los donantes de olor corporal, atribuyendo un aroma neutro a las personas mayores. Este hallazgo sugiere que los humanos tienen la capacidad de detectar la edad a través de los olores corporales, especialmente los emitidos por los individuos mayores.
El estudio también revela que este fenómeno es transcultural y conocido en Japón como kareish. El autor principal, el neurocientífico sensorial Johan Lundström, destaca que "las personas mayores tienen un olor perceptible en las axilas que las personas más jóvenes consideran bastante neutro y no muy desagradable".
La química del envejecimiento
Otro estudio publicado en The Journal of Investigative Dermatology en 2001 descubrió que el olor corporal cambia con la edad debido a la acumulación de lípidos específicos, como los ácidos grasos y Omega 3, en la piel. Estos cambios químicos contribuyen significativamente al aroma característico de las personas mayores.
Además, Lundström compara el reconocimiento del olor corporal en humanos con el papel que desempeña en otros animales: "Los olores corporales permiten liderar grupos sociales, reconocer a los individuos enfermos, gobernar las interacciones sociales y cambiar la dinámica de las relaciones."
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