El Pobre de Mí: La emotiva despedida de San Fermín
Pobre de mí, la conmovedora melodía que marca el final de las celebraciones de San Fermín en Pamplona, evoca un sentimiento agridulce. A pesar de la alegría y la euforia que han caracterizado las fiestas, un atisbo de tristeza se cierne sobre la ciudad mientras los pamploneses se preparan para despedir este extraordinario acontecimiento.
El origen de una tradición
Los orígenes de "Pobre de mí" se remontan a mediados del siglo pasado, cuando las fiestas concluían con una procesión hacia la catedral de Pamplona. La canción fue compuesta por un grupo de estudiantes de la Escuela de Artes y Oficios, quienes se inspiraron en una melodía popular de la época.
La Plaza del Ayuntamiento: Escenario de la despedida
En 1968, el Ayuntamiento de Pamplona concentró a las peñas en la Plaza del Ayuntamiento para despedir las fiestas con "Pobre de mí". Desde entonces, esta tradición anual se ha convertido en un momento muy emotivo para los pamploneses, quienes se reúnen para cantar juntos la canción.
Un canto de despedida y renovación
Si bien "Pobre de mí" está enmarcada en un contexto de tristeza y despedida, también evoca un sentimiento de esperanza y renovación. La canción simboliza el fin de un ciclo y el comienzo de uno nuevo, a medida que la ciudad se prepara para volver a la normalidad y los pamploneses se llevan consigo los recuerdos de esta experiencia inolvidable.
El ritual del pañuelo rojo
Un momento particularmente conmovedor de la despedida ocurre cuando los pamploneses, como manda la tradición, se desprenden del pañuelo rojo que han llevado alrededor del cuello durante las fiestas. Este gesto simboliza el fin de las celebraciones y el retorno a la vida cotidiana.
Fuente: https://www.huffingtonpost.es//sociedad/el-motivo-canta-pobre-mi-finalizar-fiestas-san-fermin.html
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