IA generativa: Empresas de EE.UU. y China unen fuerzas para un estándar global
Las tensiones geopolíticas entre Estados Unidos y China no siempre se reflejan en las relaciones entre sus empresas. De hecho, las compañías de ambos países, así como de otros, priorizan sus propios intereses, lo que a menudo las lleva a hacer negocios entre sí.
Colaboración en inteligencia artificial
Por ejemplo, a Nvidia le conviene vender sus GPU para inteligencia artificial (IA) sin restricciones en un mercado tan grande como el chino. Lo mismo ocurre con ASML, el fabricante neerlandés de equipos de litografía de vanguardia.
Aunque los gobiernos de Estados Unidos y sus aliados impiden que estas empresas vendan ciertos productos avanzados en China para evitar que el régimen de Xi Jinping los utilice para desarrollar aún más su capacidad militar, las empresas estadounidenses y chinas demuestran que pueden trabajar juntas más allá de las disputas gubernamentales.
Estándares para una IA generativa segura
Un ejemplo de esta colaboración es el trabajo conjunto de empresas chinas como Baidu, Tencent y Ant, y estadounidenses como Nvidia, Microsoft, Meta, Google, Amazon y OpenAI para desarrollar un estándar global que garantice el desarrollo seguro de la IA generativa.
Estas empresas están elaborando dos estándares: uno para la IA generativa en general y otro específico para los grandes modelos de lenguaje. El objetivo es establecer un marco que asegure que la IA generativa se desarrolle de manera segura tanto para los usuarios como para las empresas.
China, pionera en la regulación de la IA generativa
Es importante destacar que China fue el primer país en regular la IA generativa y los servicios relacionados en julio de 2023. También existen otros estándares internacionales, como la Recomendación sobre la Ética de la IA de la UNESCO (2021) y las recomendaciones propuestas por ISO (2022 y 2023).
Sin embargo, ninguno de estos estándares aborda la seguridad de la IA generativa y los grandes modelos de lenguaje con la misma ambición que los dos documentos elaborados por las empresas mencionadas anteriormente.
Conclusión
La colaboración entre empresas estadounidenses y chinas en el desarrollo de estándares para una IA generativa segura es un ejemplo de cómo las empresas pueden trabajar juntas más allá de las tensiones geopolíticas. Es de esperar que sus esfuerzos contribuyan a garantizar el desarrollo responsable de esta tecnología transformadora.
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