Intel enfrenta el peor año de su historia y considera medidas drásticas para salir de la crisis

En medio de un año desastroso, las acciones de Intel subieron más del 9% el viernes, pero las ganancias no fueron un reflejo de su situación. El gigante de los chips ha tenido un año pésimo, con sus acciones cayendo un 28,3% en agosto, a pesar de la gran ganancia del viernes. Sus acciones han caído un 56,1% en lo que va del año.

La crisis de Intel

La caída de las ventas en mercados clave y los crecientes costos de su ambiciosa transformación de fabricación han obligado a Intel a tomar medidas drásticas para conservar efectivo. El 1 de agosto, la compañía reportó ganancias decepcionantes y anunció que despediría al 15% de su personal, recortaría los gastos de capital utilizados para construir y equipar instalaciones de producción y suspendería el dividendo de la compañía, que había estado pagando desde 1992.

Las acciones cayeron un 26,1% al día siguiente. Intel incluso ha vendido su participación de 1,8 millones de acciones en Arm Holdings, la principal empresa de diseño de chips. La pérdida porcentual de Intel en agosto y su caída en lo que va del año son los peores desempeños de cualquier acción en el Promedio Industrial Dow Jones.

El auge y la caída de Wintel

La caída de Intel ha sido asombrosa. Intel, un elemento crítico en el desarrollo de Silicon Valley, fue fundada en 1968. Bajo el liderazgo del difunto Andrew Grove, Intel se convirtió en una fuerza tecnológica importante cuando se unió a Microsoft para crear los chips para impulsar el sistema operativo Windows que alimentaba casi todas las computadoras personales que no eran de Apple en las décadas de 1980 y 1990. Juntos, eran conocidos como "Wintel".

Grove fue brillante, agresivo y exigente. Fue famoso por acuñar la frase "solo los paranoicos sobreviven". El mundo conocía el eslogan "Intel Inside". Entre 1992 y 2018, Intel fue el mayor fabricante de semiconductores por ingresos, hasta que Samsung lo sucedió. En enero de 2020, la capitalización de mercado de Intel alcanzó un récord de 292.000 millones de dólares.

Los desafíos actuales de Intel

Después de que Grove se retiró, Intel no reconoció dos desarrollos importantes: el desarrollo de teléfonos móviles, que requerían chips más pequeños que la familia de semiconductores X86 de Intel, y el potencial y el rápido desarrollo de la inteligencia artificial. Intel todavía diseña y fabrica chips en fábricas en Arizona, Nuevo México y Oregón, pero la mayoría de sus competidores, incluido Nvidia, ahora se concentran en diseñar chips que luego son fabricados por otros, especialmente Taiwan Semiconductor Manufacturing Company.

El director ejecutivo de Intel, Pat Gelsinger, es un defensor de las fábricas, conocidas como fundiciones, con el objetivo de convertir a Intel en la segunda fundición más grande para 2030. Ha contado con la ayuda de grandes inversores como Brookfield y Apollo y 8.500 millones de dólares en subvenciones y 11.000 millones de dólares en préstamos del gobierno de Biden, que ha nombrado a Intel "un campeón nacional".

Sin embargo, el progreso es dolorosamente lento y la visión de Gelsinger puede verse amenazada. Intel espera vender 500 millones de dólares de sus chips de inteligencia artificial, conocidos como Gaudi, este año, según The Economist. Nvidia envía 20.000 millones de dólares de sus chips cada trimestre.

Fuente: https://finance.yahoo.com/news/intels-future-suddenly-may-doubt-141140752.html