Intensa nevada en la Cordillera sanjuanina afecta proyectos mineros
La reciente tormenta de nieve en la Cordillera sanjuanina ha tenido un impacto significativo en las actividades mineras de la región. A continuación, te presentamos un análisis detallado de cómo las intensas nevadas han afectado a los campamentos mineros y qué medidas se han tomado para garantizar la seguridad y el bienestar de los trabajadores.
Impacto de la tormenta de nieve en las actividades mineras
La mayoría de las empresas exploradoras desmovilizaron a casi todos sus equipos y personal ante el paso de la tercera tormenta de nieve de la temporada en la Cordillera sanjuanina. Se trata de algo inusual con respecto a lo que viene pasando casi en los últimos 10 años en los que había que esperar hasta junio o julio para que se sucedieran.
Las intensas nevadas hicieron replegar actividades en los campamentos de Pachón, Altar y Los Azules en Calingasta. En estos lugares, había sitios en donde la acumulación nívea alcanzó por momentos los 3 metros de altura según precisó GHM Contenidos, que tiene equipos de foto y video en varios lugares y que proveyó las imágenes que ilustran este informe.
Medidas de seguridad tomadas por las empresas mineras
Todos los campamentos mineros -y que pertenecen a distintas empresas- dieron cuenta a Minería & Desarrollo que habían bajado a la mayoría de su personal y los trabajadores que aún permanecían en cada campamento contaban con suficiente combustible, calefacción, comunicaciones y comida.
En Veladero se han registrado nevadas desde el martes y esperan que se prolonguen por tres días. Desde la mina de oro iglesiana, informaron a M&D que por seguridad y de acuerdo con el Operativo Invierno, se encuentran suspendidos los movimientos de buses y cargas en el camino minero. La operación está funcionando con mínimas interrupciones.
Impacto ambiental y expectativas de recarga de acuíferos
En campamento, las temperaturas los últimos días han oscilado entre los -7.5° y -4.5°. El intenso temporal de nieve abre muchas expectativas en cuenta la recarga de acuíferos en toda la zona de Iglesia y Calingasta, de manera de contar con una mayor disponibilidad de agua en estas cuencas con respecto a otros años.
Se trata de una situación que será monitoreada todo el año, pero medida en cuanto a su intensidad y aportes a los ríos en los meses de agosto y septiembre. Viento Sur, mucho frío y hasta aguanieve eran las condiciones que se repetían en toda la Cordillera.
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