Kicillof vs Máximo Kirchner: Guerra interna en el peronismo bonaerense
La política argentina, siempre convulsa, se encuentra nuevamente sacudida por una intensa interna dentro del peronismo, esta vez centrada en la provincia de Buenos Aires. Las declaraciones incendiarias del ministro de Desarrollo, Andrés “Cuervo” Larroque, contra el diputado Máximo Kirchner han destapado una profunda grieta entre el gobernador Axel Kicillof y el sector más duro del kirchnerismo, liderado por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Este artículo analiza en profundidad las causas, los actores involucrados y las posibles consecuencias de esta disputa, que amenaza con fracturar el oficialismo y complicar el panorama electoral de 2023.
La Escalada del Conflicto: Acusaciones de “Golpe Institucional”
La confrontación pública entre Larroque y Máximo Kirchner no es un hecho aislado, sino la culminación de tensiones latentes que se gestaron durante meses. El detonante inmediato fue la decisión de Kicillof de desdoblar las elecciones legislativas en la provincia, separando las elecciones de diputados provinciales de las nacionales. Esta medida, argumentada por el gobernador como una estrategia para fortalecer el poder provincial y evitar el arrastre de votos negativos, fue interpretada por el kirchnerismo como un intento de debilitar su influencia en la Legislatura bonaerense.
Larroque, en declaraciones radiales, fue contundente al acusar a Máximo Kirchner de impulsar un “golpe institucional” contra Kicillof. Sostuvo que existen sectores del kirchnerismo que buscan someter al gobernador a un núcleo político “sin legitimidad electoral”. Esta acusación, de una gravedad inusual, evidencia la profundidad de la fractura y la falta de diálogo entre las partes. La retórica utilizada por Larroque sugiere una percepción de que el kirchnerismo está dispuesto a utilizar cualquier medio para mantener el control, incluso a costa de la institucionalidad democrática.
La respuesta de La Cámpora, a través de la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, no se hizo esperar. Mendoza criticó duramente la decisión de Kicillof, calificándola de “unilateral e inconsulta” y acusándolo de haberse “cortado solo”. Además, reveló que Cristina Kirchner había manifestado su disposición a competir contra Kicillof en caso de que el gobernador insistiera con el desdoblamiento, lo que abre la posibilidad de una contienda interna en la tercera sección electoral, la más importante de la provincia.
Antecedentes y Actores Clave: Un Peronismo Dividido
El Legado de La Cámpora y la Distancia de Larroque
Para comprender la magnitud del conflicto, es fundamental analizar los antecedentes y las características de los actores involucrados. Andrés “Cuervo” Larroque fue uno de los fundadores de La Cámpora, la organización juvenil que jugó un papel crucial en el ascenso de Cristina Kirchner al poder. Sin embargo, Larroque se alejó de esa estructura hace años, manteniendo una postura más crítica y pragmática. Esta distancia le permite analizar la situación con mayor objetividad y expresar sus opiniones sin las ataduras ideológicas que podrían limitar a otros dirigentes.
Máximo Kirchner, por su parte, es el líder indiscutible de La Cámpora y el principal heredero del legado kirchnerista. Su figura representa la continuidad del proyecto político iniciado por Néstor y Cristina Kirchner, y su influencia en el peronismo es innegable. Sin embargo, su estilo de liderazgo, considerado por algunos como autoritario y poco dialogante, ha generado tensiones con otros sectores del partido.
Axel Kicillof: El Gobernador en la Mira
Axel Kicillof, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, se encuentra en el centro de la tormenta. Su figura, que emergió como una alternativa dentro del peronismo, ha generado recelos en el kirchnerismo más duro, que lo percibe como un rival potencial. Kicillof, con su perfil técnico y su discurso moderado, representa una renovación dentro del partido, pero también enfrenta el desafío de mantener la unidad en un contexto de profunda polarización.
La decisión de desdoblar las elecciones legislativas puede interpretarse como un intento de Kicillof por consolidar su propio espacio político y reducir la dependencia del kirchnerismo. Al separar las elecciones de diputados provinciales de las nacionales, el gobernador busca fortalecer el poder provincial y evitar el arrastre de votos negativos que podrían perjudicar a sus candidatos.
La Anormalidad Institucional en la Legislatura Bonaerense
El Rol de los Presidentes de Bloque Oficialistas
Larroque denunció una “anormalidad institucional” en la Legislatura bonaerense, señalando que los dos presidentes de bloques que se dicen oficialistas actúan como “arietes de la oposición”. Esta acusación sugiere que existe una falta de lealtad y coordinación dentro del oficialismo, y que algunos legisladores están trabajando en contra de los intereses del gobierno provincial. La situación descrita por Larroque evidencia la dificultad de Kicillof para obtener el apoyo necesario para impulsar su agenda legislativa.
La falta de cohesión en la Legislatura bonaerense es un reflejo de la profunda división que atraviesa el peronismo. Los legisladores que se oponen a Kicillof responden a los intereses de Máximo Kirchner y buscan debilitar su gobierno. Esta situación dificulta la gobernabilidad y genera incertidumbre sobre el futuro político de la provincia.
El Desdoblamiento Electoral: Un Punto de Quiebre
El desdoblamiento de las elecciones legislativas fue el punto de quiebre que desencadenó la crisis actual. La decisión de Kicillof, tomada sin el consenso del resto del espacio político, fue interpretada por el kirchnerismo como una afrenta y un intento de marginarlos del poder. La polémica en torno al desdoblamiento electoral ha exacerbado las tensiones y ha dificultado cualquier posibilidad de diálogo.
Cristina Kirchner y el Futuro del Peronismo
La Ex Presidenta y su Apoyo a Máximo Kirchner
El rol de Cristina Kirchner en este conflicto es crucial. Larroque consideró que la ex presidenta ha elegido apoyar al sector de Máximo Kirchner, aunque expresó su deseo de que rectifique esa postura. La decisión de Cristina Kirchner de respaldar a su hijo tiene un impacto significativo en el equilibrio de poder dentro del peronismo y refuerza la posición de Máximo Kirchner como el líder indiscutible del kirchnerismo.
La relación entre Cristina Kirchner y Axel Kicillof siempre ha sido ambivalente. Si bien la ex presidenta apoyó la candidatura de Kicillof a la gobernación, también ha mantenido una actitud cautelosa hacia su gestión. La decisión de Cristina Kirchner de respaldar a Máximo Kirchner sugiere que desconfía de Kicillof y que lo considera un rival potencial.
La Posibilidad de una Contienda Interna
La posibilidad de una contienda interna en la tercera sección electoral, con Cristina Kirchner compitiendo contra Kicillof, representa un escenario de máxima tensión para el peronismo. Una disputa entre dos figuras tan importantes del partido podría fracturar aún más el oficialismo y complicar las perspectivas electorales de 2023. La decisión final dependerá de la voluntad de Cristina Kirchner y de su capacidad para negociar con Kicillof.
“Lo disimulamos por años en aras de la unidad. Pero si van a cruzar todos los límites, hablemos las cosas con claridad.”
Esta frase de Andrés Larroque resume la frustración y el hartazgo de un sector del peronismo que ha intentado mantener la unidad a pesar de las diferencias internas. La paciencia parece haberse agotado, y la confrontación abierta se ha convertido en la única vía para expresar las disidencias.
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