La inflación se enfría: el IPC aumenta 8,4% en abril, el menor aumento en meses
El costo de vida en Argentina continúa en un proceso de desinflación y el rubro alimentos y bebidas juega un rol central en esta tendencia. Luego del pico inflacionario de 25,50% en diciembre de 2023, la inflación mensual regresó a un dígito en abril, según estimaciones privadas.
Inflación de alimentos y bebidas: un factor clave en la desaceleración
La inflación en el rubro alimentos y bebidas ha sido un factor clave en la desaceleración general de precios en Argentina. En abril, este rubro experimentó un aumento del 6,8%, según la consultora C&T. Este dato representa la menor variación mensual desde julio de 2022.
Los principales impulsores de esta desaceleración fueron los panificados, las carnes y los lácteos. El impacto de la sequía en la producción de granos ha llevado a un aumento en los precios de los panificados, mientras que la menor oferta de carne y el aumento de los costos de producción han contribuido al alza en los precios de este producto. Los lácteos, por su parte, han sido afectados por el aumento en los costos de alimentación del ganado.
Medidas gubernamentales para contener la inflación
El gobierno argentino ha implementado una serie de medidas para contener la inflación, entre ellas:
- Control de precios:
El gobierno ha establecido precios máximos para una serie de productos esenciales, como alimentos, medicamentos y combustibles.
Saneamiento del balance del Banco Central: El gobierno ha buscado reducir el déficit fiscal y la emisión monetaria, lo que ha ayudado a estabilizar el tipo de cambio y a frenar la inflación.
Crawling peg: El Banco Central Argentino ha implementado un sistema de microdevaluaciones diarias de 2% para mantener el tipo de cambio bajo control y evitar una devaluación brusca.
Perspectivas para la inflación
Según los analistas, es probable que la inflación continúe desacelerándose en los próximos meses. La Fundación Libertad y Progreso estima que la inflación en abril fue del 8,4%, mientras que C&T proyecta un aumento del 7% en mayo. El menor impacto de las tarifas reguladas y la desaceleración en el rubro alimentos y bebidas contribuirán a esta tendencia.
Sin embargo, los analistas advierten que la inflación aún se mantiene alta y es probable que el gobierno enfrente desafíos para reducirla a niveles más bajos. La persistencia de la inflación en los alimentos y bebidas y el impacto potencial de la sequía y los conflictos geopolíticos sobre los precios de las materias primas son factores que podrían dificultar el logro de este objetivo.
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