La megaminería: una amenaza para el agua y el medio ambiente
La defensa del agua frente a la megaminería: una lucha por la vida en territorio neuquino
El clamor ambientalista contra la megaminería
Organizaciones ambientalistas alzan su voz en la provincia de Neuquén para exigir una prohibición sobre el uso de agua en proyectos de megaminería a cielo abierto. Representantes de la Asamblea Socio Ambiental de Junín de los Andes, junto con otros grupos ecologistas, solicitan el tratamiento de un proyecto de ley que proteja el recurso hídrico fundamental de la región.
Sandra Ferrero, referente de la Asamblea, advierte sobre la amenaza que representan las 50 concesiones mineras otorgadas en la provincia, que solo benefician a las empresas y ponen en peligro el agua, esencial para la vida y el desarrollo de las comunidades locales. Denuncia el uso de toneladas de explosivos que contaminan el ambiente y dejan pasivos ambientales irreparables.
La importancia de la participación ciudadana
Ferrero agradece la apertura de la comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Desarrollo Sostenible para escuchar las inquietudes de los ambientalistas. Destaca la importancia de la participación ciudadana en la toma de decisiones que afectan al territorio y denuncia la falta de transparencia en los proyectos mineros.
El sacerdote Martín Godler, de Las Coloradas, expresa su preocupación por la amenaza real y existente que representa la megaminería para la provincia. Recuerda el exitoso movimiento de resistencia que logró frenar un proyecto de la multinacional Southern Cooper, subrayando la necesidad de seguridad jurídica para proteger el medio ambiente.
El proyecto de ley y sus objetivos
El abogado Germán Zuñiga expone los fundamentos del proyecto de ley, que busca brindar seguridad jurídica ante la omisión de la legislación actual. Denuncia que las empresas tienen libertad para cometer delitos ambientales sin enfrentar consecuencias. Zuñiga enfatiza que el proyecto no se opone al desarrollo económico, sino que aboga por la defensa de la vida y el futuro.
Andrés Blanco, diputado del PTS-FIT-U, reconoce la confrontación entre el desarrollo económico y la vida, pero critica la desinformación y el negacionismo que buscan desprestigiar el debate. Lamenta que la iniciativa vaya en contra de las políticas nacionales de incentivos a las grandes inversiones, que favorecen la extracción de recursos.
El control ciudadano y el apoyo político
Gabriela Suppicich, diputada del FIT-U, valora la facultad de contralor de la población prevista en el proyecto y apoya la discusión de las iniciativas con las comunidades afectadas. Considera que la ciudadanía debe tener voz y voto en las decisiones que impactan directamente en su territorio.
El agua debe ser para la vida y para los pueblos, no para las grandes corporaciones.- Sandra Ferrero
El impacto de la megaminería en el medio ambiente
El aire
La megaminería genera grandes cantidades de polvo y emisiones gaseosas que contaminan el aire y afectan la salud respiratoria de las comunidades. El polvo también puede dañar los cultivos y la vegetación natural.
El clima
Los cambios en la cobertura terrestre, la contaminación del aire y el consumo de agua asociados con la megaminería pueden alterar los patrones climáticos locales y regionales, provocando sequías, inundaciones y otros eventos climáticos extremos.
El agua
La megaminería utiliza grandes cantidades de agua para sus operaciones, lo que puede provocar escasez de agua para las comunidades locales y los ecosistemas. El uso de químicos tóxicos en el proceso minero también puede contaminar el agua superficial y subterránea.
La tierra
La minería a cielo abierto deja enormes cráteres y altera la geología del área, lo que puede afectar la estabilidad del suelo y provocar erosión. Los residuos mineros también pueden contener metales pesados y otros contaminantes que pueden filtrarse al suelo y las aguas subterráneas.
La biodiversidad
La megaminería destruye y fragmenta los hábitats, lo que provoca la pérdida de biodiversidad. Los contaminantes liberados por las operaciones mineras también pueden ser tóxicos para la vida silvestre y alterar las cadenas alimentarias.
Conclusiones
La megaminería es una actividad altamente destructiva con graves consecuencias para el medio ambiente y la salud humana. La prohibición del uso de agua en proyectos de megaminería a cielo abierto es esencial para proteger el recurso hídrico y garantizar la vida y el bienestar de las comunidades locales.
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