Las Malvinas, Georgias y Sandwich: Un legado irrenunciable
La reivindicación de la soberanía argentina sobre las Islas Malvinas: una lucha histórica y jurídica
Los fundamentos históricos
Las Malvinas fueron descubiertas en 1520 por la expedición española de Fernando de Magallanes. España ejerció su soberanía sobre las islas durante siglos, hasta que en 1811 las Provincias Unidas del Río de la Plata declararon su independencia.
A partir de entonces, Argentina heredó la soberanía sobre las Malvinas por derecho sucesorio. El pabellón argentino fue izado en las islas en 1820 por el coronel de Marina David Jewett. En 1829, se creó la Comandancia Política y Militar de las Islas Malvinas, consolidando el ejercicio pleno de la soberanía argentina.
La usurpación británica
En 1833, el Reino Unido ocupó las Islas Malvinas por la fuerza, expulsando a las autoridades argentinas y a la población que allí vivía. Este acto de fuerza fue rechazado por el gobierno argentino y no ha sido reconocido por ningún gobierno argentino posterior.
Desde entonces, las Malvinas son objeto de una disputa de soberanía entre Argentina y el Reino Unido. La ONU reconoció la disputa en 1965, instando a ambos países a encontrar una solución pacífica.
Las razones geográficas
Las Malvinas se encuentran dentro de la plataforma submarina argentina, a solo 346 kilómetros de la costa continental. Esta ubicación estratégica las convierte en una parte integral del territorio argentino.
Además, las Malvinas se encuentran a 12.000 kilómetros de Inglaterra, lo que refuerza el argumento de que no tienen ningún vínculo geográfico con el Reino Unido.
Los argumentos de derecho internacional
El Tratado de Tordesillas, firmado en 1494, dividió el mundo entre España y Portugal. Las Malvinas quedaron dentro de la zona española, lo que confirma la soberanía española sobre las islas.
Además, Argentina ha ejercido su soberanía sobre las Malvinas desde su independencia en 1811. Ha ocupado las islas, ha establecido estructuras gubernamentales y ha promovido el desarrollo de actividades comerciales y el asentamiento de población.
El objetivo irrenunciable
La recuperación de las Islas Malvinas y el ejercicio pleno de la soberanía argentina sobre ellas es un objetivo permanente e irrenunciable para todos los argentinos.
La Constitución Nacional, en su Disposición Transitoria Primera, establece que las Islas Malvinas son "parte integrante e inalienable del territorio nacional".
"Las Islas Malvinas son y serán argentinas, por razones históricas, geográficas y de derecho internacional. Son parte de nuestro territorio y ningún acto de fuerza podrá cambiar esa realidad."
Cancillería Argentina
Artículos relacionados