Los alimentos que consumimos contienen sustancias tóxicas naturales.

Las plantas generan veneno para protegerse de los herbívoros, lo que significa que muchos alimentos contienen sustancias tóxicas naturales. Por ejemplo, la judía verde contiene factores que disuelven los glóbulos rojos de la sangre, mientras que el café presenta el ácido clorogénico que provoca mutaciones en el ADN. Incluso los alimentos más comunes, como las patatas, contienen solanina, una sustancia tóxica. Además, el marisco puede causar varias intoxicaciones debido a las algas que consume. Aunque nuestro cuerpo está acostumbrado a convivir con cierta cantidad de toxinas, debemos recordar que no por ser natural, el alimento es inocuo.

Fuente: /ciencia/60514.html

REFLEXIÓN: La naturaleza es sabia y las plantas han desarrollado mecanismos de defensa para protegerse de los herbívoros. Sin embargo, estas defensas pueden ser tóxicas para los humanos. Aunque ingerimos pequeñas cantidades de sustancias tóxicas naturales en nuestra dieta diaria, es importante tener en cuenta que no por ser natural, el alimento es inocuo. Debemos ser conscientes de los riesgos y tomar medidas para controlar la cantidad de sustancias tóxicas que ingerimos. La regla de oro de la toxicología es que el veneno es la dosis, por lo que debemos ser cuidadosos con lo que comemos y cómo lo preparamos. En resumen, la naturaleza es sabia pero también puede ser peligrosa, por lo que debemos ser conscientes de los riesgos y tomar medidas para protegernos.