"Los impuestos que afectan la competitividad empresarial"
En el presente artículo, se abordará el análisis realizado por el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA) respecto a la presión fiscal y las expectativas generadas con la implementación del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado. Este estudio se enfoca en la simplificación de las intervenciones estatales, especialmente en el ámbito tributario, con el propósito de mejorar la competitividad y el crecimiento económico del país.
Análisis de la presión fiscal y propuestas de transformación
Según IDESA, una de las transformaciones prioritarias que debe abordar el Estado argentino es la reforma tributaria. La propuesta se fundamenta en la idea de que los buenos impuestos deben absorber a los malos impuestos, lo cual contribuirá a aumentar la competitividad y dinamizar la economía nacional. En este sentido, se plantea la necesidad de eliminar impuestos que encarecen la producción de manera artificial, con el objetivo de impulsar el desarrollo económico sin recurrir a devaluaciones.
Ministerio de Economía El Ministerio de Economía ha señalado que, durante el primer semestre del 2024, la presión tributaria a nivel nacional y provincial alcanzó el 28% del Producto Bruto Interno (PBI). Destaca que los cuatro impuestos que más afectan la competitividad, como los Derechos de Exportación, el Impuesto PAIS, el Impuesto al Cheque y el Impuesto sobre los Ingresos Brutos, representan el 8% del PBI. Para eliminar estos impuestos sin perder recaudación, el PBI debería incrementarse en un 40%.
Desafíos y propuestas para la transformación fiscal
El análisis de IDESA revela que la estrategia de esperar a que la economía crezca para reducir los impuestos distorsivos resulta inconsistente. Se estima que sería necesario un crecimiento sostenido del PBI del 7% durante 5 años o del 3,5% durante 10 años para compensar la eliminación de dichos tributos. Ante esta situación, se plantea la urgencia de eliminar los malos impuestos para impulsar el crecimiento económico, en lugar de esperar a que el PBI aumente para luego reducir la carga impositiva.
Asimismo, la propuesta de reducir el gasto público como condición previa para eliminar los impuestos distorsivos también presenta desafíos significativos. Si bien se ha observado una disminución del gasto a nivel nacional, este proceso es complejo y requerirá tiempo. En el caso de las provincias, el Impuesto sobre los Ingresos Brutos financia aproximadamente el 20% del gasto público primario, lo que dificulta una reducción abrupta y sostenible en el corto plazo.
Alternativas para la simplificación y mejora del sistema tributario
Una alternativa planteada por IDESA es que los buenos impuestos absorban a los malos impuestos, con el objetivo de simplificar el sistema tributario y mejorar la competitividad. Por ejemplo, proponen que el Impuesto al Valor Agregado (IVA) absorba el Impuesto sobre los Ingresos Brutos y las tasas municipales, dado que los tres gravan las ventas. El IVA se destaca por ser un impuesto de mejor calidad, menos perjudicial para la competitividad y más fácil de controlar, lo que podría contribuir a aumentar los niveles de cumplimiento impositivo y fortalecer la producción.
En este sentido, se menciona el caso de Brasil, que está transitando un proceso para sustituir los impuestos sobre las ventas por un IVA unificado, con el objetivo de eliminar los tributos más perjudiciales y mejorar la eficiencia del sistema tributario. El rol del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado se presenta como fundamental en este proceso de transformación, con la responsabilidad de impulsar cambios que promuevan la estabilidad económica y el desarrollo sostenible del país.
Fuente: https://partedepesca.com.ar/d/los-cuatro-impuestos-que-mas-erosionan-la-competitividad/
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