Polémica selección de embriones por coeficiente intelectual en tratamientos de fertilidad
El debate sobre el futuro de la selección embrionaria se ha reavivado con la noticia de que una empresa estadounidense planea ofrecer un servicio que permite a las parejas seleccionar embriones con un coeficiente intelectual más alto.
Implicaciones éticas
Expertos en ética y genética han expresado su preocupación por las posibles implicaciones sociales de esta práctica. Argumentan que podría perpetuar la desigualdad social al permitir que los padres ricos mejoren genéticamente a sus hijos. También temen que normalice la creencia de que algunas personas son genéticamente superiores a otras.
acceso a los datos
Para desarrollar su método de selección genética, la empresa ha utilizado datos del Biobanco del Reino Unido, un repositorio genético financiado con fondos públicos. Aunque en el Reino Unido está prohibida la selección de embriones por su coeficiente intelectual, no existen restricciones similares en Estados Unidos. Esto ha permitido a la empresa promocionar sus servicios, aunque la práctica aún no se ha generalizado.
Perspectivas de futuro
Los científicos y activistas han criticado el uso de datos del Biobanco del Reino Unido con fines comerciales. Argumentan que socava la confianza pública y puede conducir a la discriminación genética. El CEO de la empresa, Michael MacRae, sigue siendo optimista sobre el futuro de la selección genética. Cree que su tecnología permitirá a los padres tener hijos "inteligentes, saludables y libres de enfermedades". Sin embargo, sus palabras han sido recibidas con escepticismo por la comunidad científica.
Criterios de acceso a los datos
El bioeticista de la Universidad de Stanford, Hank Greely, ha pedido al gobierno que considere la posibilidad de aplicar nuevas restricciones al uso de los datos del Biobanco del Reino Unido. Cree que el acceso a estos datos debe ser regulado para evitar el uso indebido comercial.
Artículos relacionados