Policía Bonaerense: Aumentan Categorías y Extras Horarios Tras Resultados Electorales

La Policía Bonaerense, columna vertebral de la seguridad en la provincia más poblada de Argentina, se encuentra en un punto de inflexión. Tras la reciente derrota del gobierno nacional en las elecciones provinciales de Buenos Aires, y en un contexto de tensiones políticas y económicas, se han anunciado cambios significativos en la estructura salarial de las Horas Polad (Personal Destinado). La creación de dos nuevas categorías y la definición de los montos de los extras buscan, según las autoridades, mejorar las condiciones laborales y el poder adquisitivo de los efectivos, pero también se interpretan como una estrategia para calmar el descontento y evitar posibles conflictos. Este artículo analiza en detalle estos cambios, sus implicaciones, el contexto político que los rodea y las reacciones generadas en la fuerza policial.

El Contexto Político y Económico: Un Escenario de Tensiones

La derrota del partido gobernante en la provincia de Buenos Aires ha generado un terremoto político. Los gobernadores provinciales, tanto peronistas como aquellos que inicialmente mostraron colaboración con el gobierno nacional, han expresado su descontento con las políticas de ajuste y la falta de respuestas a las demandas de sus territorios. La convocatoria a una reunión de emergencia en Balcarce 50, la sede de la Casa Rosada, evidenció la necesidad del gobierno central de buscar acuerdos y calmar las aguas. Sin embargo, la respuesta ha sido tibia, con solo el gobernador de San Juan mostrando un apoyo explícito. Los demás, ya sea por desconfianza o por la presión de sus propias bases políticas, se han mantenido distantes o han expresado abiertamente sus críticas. Este clima de incertidumbre política se suma a una situación económica sumamente compleja, con una alta inflación, una creciente pobreza y una asfixia financiera para las provincias, lo que agudiza las tensiones sociales y aumenta la presión sobre las fuerzas de seguridad.

La Policía Bonaerense, como parte integral del Estado provincial, se ve directamente afectada por esta situación. La falta de recursos, la demora en los pagos y la pérdida de poder adquisitivo han generado un profundo malestar entre los efectivos, que se ven obligados a enfrentar situaciones cada vez más difíciles con salarios que no alcanzan para cubrir sus necesidades básicas. Este descontento se ha manifestado en diversas ocasiones a través de protestas, reclamos y demandas salariales, lo que ha puesto en riesgo la estabilidad de la fuerza policial y la seguridad de la provincia.

Horas Polad: ¿Qué son y por qué son importantes?

Las Horas Polad, o Personal Destinado, son un complemento salarial que se otorga a los policías de la provincia de Buenos Aires por las tareas adicionales que realizan fuera de su horario habitual de trabajo. Estas tareas pueden incluir servicios de custodia, patrullaje, operativos especiales, investigaciones y otras actividades que demandan un esfuerzo extra por parte de los efectivos. Las Horas Polad representan una parte importante del salario de muchos policías, y su pago regular y en tiempo y forma es fundamental para mantener la moral y la motivación de la fuerza.

El sistema de Horas Polad ha sido objeto de controversia en los últimos años, debido a demoras en los pagos, irregularidades en la liquidación y la falta de transparencia en los criterios de asignación. Estas situaciones han generado un fuerte reclamo por parte de los sindicatos policiales y han puesto en evidencia la necesidad de una regulación más clara y eficiente del sistema. La creación de las nuevas categorías y la definición de los montos de los extras buscan, en parte, solucionar estos problemas y garantizar un pago justo y equitativo por las tareas adicionales realizadas por los policías.

Las Nuevas Categorías y los Montos de los Extras

Las autoridades de la Policía Bonaerense han anunciado la creación de dos nuevas categorías dentro del sistema de Horas Polad: la categoría A y la categoría B. La categoría A estará destinada a los policías que realicen tareas de mayor riesgo o complejidad, como investigaciones de delitos graves, operativos especiales en zonas conflictivas o custodias de personas en situación de vulnerabilidad. La categoría B, por su parte, estará destinada a los policías que realicen tareas de menor riesgo o complejidad, como controles de tránsito, patrullaje preventivo o custodias de eventos públicos. Los montos de los extras asignados a cada categoría serán diferentes, reflejando el nivel de riesgo y la complejidad de las tareas realizadas.

Según lo anunciado, los policías de la categoría A recibirán un adicional del 50% sobre su salario base por cada hora de trabajo adicional, mientras que los policías de la categoría B recibirán un adicional del 30%. Además, se establecerán criterios claros y objetivos para la asignación de las categorías, con el objetivo de evitar arbitrariedades y garantizar la transparencia del sistema. Se espera que estos cambios beneficien a la mayoría de los efectivos de la Policía Bonaerense, especialmente a aquellos que realizan tareas de mayor riesgo y complejidad.

La implementación de estas nuevas categorías y los montos de los extras se realizará de forma gradual, comenzando por los efectivos que se encuentren prestando servicio en las zonas más conflictivas de la provincia. Se prevé que la medida tenga un impacto positivo en la moral y la motivación de la fuerza policial, y que contribuya a mejorar la calidad del servicio que se presta a la ciudadanía.

Reacciones y Perspectivas: ¿Un Alivio Temporal o una Solución Definitiva?

El anuncio de la creación de las nuevas categorías y la definición de los montos de los extras ha generado diversas reacciones en la Policía Bonaerense. Los sindicatos policiales han valorado positivamente la medida, considerándola un paso en el camino correcto para mejorar las condiciones laborales y el poder adquisitivo de los efectivos. Sin embargo, también han advertido que se trata de una solución temporal y que es necesario abordar de forma integral los problemas estructurales que afectan a la fuerza policial, como la falta de recursos, la obsolescencia del equipamiento y la necesidad de una formación continua y de calidad.

Algunos efectivos han expresado su escepticismo ante la medida, argumentando que los montos de los extras son insuficientes para compensar la pérdida de poder adquisitivo causada por la inflación y que la asignación de las categorías puede ser arbitraria y discrecional. Otros, en cambio, han manifestado su esperanza de que los cambios contribuyan a mejorar su calidad de vida y a fortalecer la seguridad en la provincia. La efectividad de la medida dependerá, en gran medida, de la transparencia en la implementación, la claridad de los criterios de asignación y la garantía de un pago regular y en tiempo y forma de las Horas Polad.

En definitiva, la creación de las nuevas categorías y la definición de los montos de los extras representan un intento por parte de las autoridades de la Policía Bonaerense de responder a las demandas de los efectivos y de calmar el descontento generado por la situación económica y política. Sin embargo, se trata de una medida paliativa que no aborda los problemas estructurales de la fuerza policial. Para lograr una solución definitiva, es necesario un compromiso a largo plazo por parte del gobierno provincial y una inversión sostenida en recursos, equipamiento y formación.

El Impacto en la Seguridad Ciudadana

La moral y el bienestar de la fuerza policial tienen un impacto directo en la seguridad ciudadana. Un policía desmotivado, con bajos salarios y sin las herramientas necesarias para realizar su trabajo, es menos eficiente y menos propenso a arriesgar su vida para proteger a la comunidad. Por lo tanto, mejorar las condiciones laborales de los efectivos de la Policía Bonaerense es fundamental para garantizar la seguridad de los ciudadanos.

La creación de las nuevas categorías y la definición de los montos de los extras pueden contribuir a mejorar la moral y la motivación de la fuerza policial, al reconocer y recompensar el esfuerzo adicional realizado por los efectivos que se desempeñan en tareas de mayor riesgo o complejidad. Esto, a su vez, puede traducirse en una mayor eficiencia en la prevención del delito, una respuesta más rápida y efectiva ante las emergencias y una mayor confianza de la ciudadanía en la policía.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que la mejora de las condiciones laborales de la policía es solo un aspecto de una estrategia integral de seguridad ciudadana. Para lograr resultados duraderos, es necesario abordar también las causas profundas de la delincuencia, como la pobreza, la desigualdad social, la falta de oportunidades y la impunidad. Además, es fundamental fortalecer la coordinación entre las diferentes fuerzas de seguridad, mejorar la inteligencia criminal y promover la participación ciudadana en la prevención del delito.

Fuente: https://www.pagina12.com.ar/856368-sin-cambios-pese-a-la-derrota-el-gobierno-lanza-una-mesa-nac