Reino Unido acusado de financiar la guerra de Rusia a través de importaciones de petróleo refinado

Bajo la mirada acusadora del mundo, el Reino Unido se encuentra atrapado en una red de contradicciones éticas. Mientras proclama su apoyo incondicional a Ucrania en su lucha contra el implacable agresor ruso, las acciones del gobierno británico parecen socavar sus propias afirmaciones. El continuo flujo de petróleo refinado de Rusia al Reino Unido, aunque indirecto, ha planteado serias dudas sobre la sinceridad del Reino Unido en su condena de la agresión de Putin.

El engañoso juego de importaciones de petróleo

A pesar de la prohibición impuesta por el Reino Unido a la importación de productos petrolíferos rusos, una laguna jurídica flagrante ha permitido que el petróleo ruso siga fluyendo hacia el país. Los datos gubernamentales analizados por el sitio de noticias medioambientales Desmog revelan que las importaciones de petróleo refinado de India, China y Turquía alcanzaron la asombrosa cifra de 2.500 millones de euros en 2023, un valor récord en consonancia con el año anterior.

Este flagrante vacío legal permite que el petróleo ruso se refine en países intermedios, eliminando su origen ruso y permitiendo así que elude la prohibición comercial. Como resultado, el petróleo ruso se vende a países aliados para su procesamiento y posterior exportación al Reino Unido.

Un "lavado" de dinero que financia una guerra

El grupo de campaña Global Witness ha denunciado este proceso como un "lavado" que está

"llenando los cofres de guerra del Kremlin".

Lela Stanley, investigadora principal de Global Witness

Mediante el uso de este artilugio, el Reino Unido está, sin saberlo, ayudando a Rusia a financiar su brutal campaña militar en Ucrania. El valor del petróleo refinado exportado desde India al Reino Unido se ha disparado desde la invasión rusa de 2022, casi triplicándose hasta alcanzar los 1.700 millones de euros.

Una hipocresía que se vuelve insostenible

Mientras el Reino Unido se desvive por proporcionar apoyo militar y financiero a Ucrania, su continua dependencia del petróleo ruso plantea interrogantes sobre la sinceridad de su compromiso. El gobierno británico debe reconocer la hipocresía de su postura y tomar medidas inmediatas para cerrar la laguna que permite que el petróleo ruso siga llegando al país.

La prohibición de las importaciones de combustibles derivados del petróleo ruso enviaría una señal clara de que el Reino Unido no tolerará la agresión rusa y está dispuesto a asumir los costes económicos de apoyar a Ucrania.

Un cambio hacia una dependencia peligrosa

La dependencia del Reino Unido de las importaciones de petróleo de Rusia ha disminuido significativamente desde el inicio de la guerra en Ucrania. Sin embargo, esta disminución se ha visto compensada por un aumento de las importaciones de combustibles fósiles procedentes de otros petroestados autoritarios, como Argelia, Bahréin, Kuwait y Arabia Saudita.

Esta tendencia es preocupante, ya que perpetúa la dependencia del Reino Unido de regímenes represivos y socava su compromiso de reducir las emisiones de carbono.

Fuente: https://www.huffingtonpost.es//global/reino-unido-cae-trampa-rusia-acusado-pagar-guerra-ucrania.html