Reintroducción de huemules: clave para su supervivencia
Los huemules (Hippocamelus bisulcus) son los cérvidos más australes del mundo. Sin embargo, su población se ha reducido en un 99% debido a la sobrecacería y otros factores que han impedido su migración de las montañas a las praderas según las estaciones del año. En la actualidad, solo quedan entre 300 y 500 ejemplares en Argentina, fragmentados en unos sesenta grupos y confinados en las zonas altas de las montañas andinas.
Las estrategias actuales para la conservación de los huemules no están logrando revertir su disminución demográfica. Así lo advierte Werner Flueck, investigador del CONICET en el Parque Nacional "Nahuel Huapi" y autor de un reciente artículo que propone la reintroducción de esta especie en sitios históricos representativos de su hábitat de origen.
Evidencias arqueológicas, ecológicas e históricas demuestran que los huemules no solo habitaban en los Andes, sino también cerca de la costa atlántica en lugares como la Península Valdés, Puerto Deseado y el Estrecho de Magallanes. En el pasado, migraban estacionalmente desde las zonas boscosas de los Andes a las regiones no boscosas de la península patagónica durante los inviernos.
La sobrecacería y el confinamiento en las altas montañas han sido factores determinantes en la disminución de la población de huemules. Los huemules no temen a la presencia humana, lo que facilita su caza. Además, las tradiciones migratorias de esta especie se perdieron debido a la sobrecacería en el pasado y al establecimiento de poblaciones humanas en sus hábitats.
La falta de acceso a zonas de invernada con mayor calidad nutricional ha afectado la salud de los huemules, provocando problemas estructurales en su esqueleto y pérdida de dientes. Esto reduce su eficiencia para alimentarse y disminuye aún más su tasa de reproducción.
Aunque se han logrado algunos avances en la rehabilitación de huemules en la "Estación de Rehabilitación y Recría Shoonem", dirigida por la Fundación Shoonem, esto no es suficiente para salvar a la especie. Es necesario reintroducir grupos de huemules en ambientes de alta calidad nutricional que históricamente ocupaban sus antepasados.
Estas áreas podrían ser parques nacionales o provinciales, así como campos privados que reciban incentivos para apoyar la convivencia con los huemules. Permitir que los huemules habiten en estas regiones les permitirá vivir de manera más saludable y aumentar sus tasas de reproducción y crecimiento poblacional.
La conservación de los huemules es crucial, ya que desempeñan un papel importante como herbívoros nativos en ciertos ecosistemas. Evitar su extinción es fundamental para mantener el equilibrio de estos ecosistemas y preservar la biodiversidad.
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