Repartidores unidos recuperan moto robada en caravana a la villa
Asalto a repartidor culmina en una caravana de recuperación en una villa
La inseguridad en aumento
Los trabajadores del reparto se enfrentan a una escalada de violencia y hechos delictivos que ponen en riesgo su integridad y sus medios de subsistencia. El robo de la moto de un repartidor en San Justo, provincia de Buenos Aires, encendió la indignación y la movilización de sus compañeros, quienes organizaron una caravana para recuperar el vehículo robado.
Los repartidores, cansados de la impunidad y la falta de seguridad, se dirigieron a la Villa Santos Vega sin el acompañamiento de las fuerzas de seguridad. A pesar del peligro, lograron encontrar y recuperar la moto robada, demostrando su determinación y solidaridad.
El testimonio del repartidor asaltado
En diálogo con TN, la víctima del asalto relató el momento en que fue despojado de su moto: "Me robaron la moto y al toque cayeron todos mis compañeros para recuperarla".
El repartidor manifestó su frustración por la constante inseguridad: "Corrés peligro en cada minuto, no se puede estar".
La preocupación de los compañeros
Los compañeros del repartidor asaltado expresaron su preocupación por la inseguridad que enfrentan diariamente en su trabajo.
"Todos los días es así, nunca sé si vuelvo a casa", lamentó uno de los jóvenes.
"Arriesgamos la vida en todo momento porque puede pasar a la mañana o a la noche", agregó otro.
El temor a la escalada de violencia
Los repartidores alertaron sobre el aumento de la violencia en los delitos y el temor que sienten por su seguridad.
"Nos pueden disparar o amenazar con una pistola y rompernos la cabeza", expresó uno de los repartidores.
"Hay movimiento de la Policía, pero no abastece la situación en la que estamos nosotros", concluyó.
Antecedente de acción colectiva
Esta no es la primera vez que los repartidores actúan en conjunto para ayudarse en situaciones de inseguridad.
En marzo del año pasado, un grupo de repartidores de la zona oeste ya había logrado recuperar otro vehículo y reducir a uno de los ladrones en una secuencia similar.
No podemos seguir viviendo con miedo. Tenemos que protegernos entre nosotros y exigir a las autoridades que nos brinden la seguridad que merecemos.
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