Sanciones petroleras de EE. UU. presionan a Maduro a garantizar elecciones justas
EE.UU. restablece sanciones petroleras a Venezuela para presionar a Maduro
Medidas punitivas para forzar elecciones democráticas
Después de semanas de advertencias, Estados Unidos ha cumplido su promesa e impuesto nuevas restricciones a la exportación de petróleo y gas venezolano. El objetivo de estas sanciones es presionar al presidente Nicolás Maduro para que cumpla con los compromisos electorales que, según Washington, ha incumplido flagrantemente.
La Administración Biden había aliviado estas sanciones en octubre en un intento de fomentar la buena voluntad y animar a Maduro a que cumpliera la hoja de ruta para unas elecciones democráticas pactadas entre el chavismo y la oposición en los Acuerdos de Barbados.
Sin embargo, la inhabilitación de la candidatura de María Corina Machado y la negativa de las autoridades a registrar a su sustituta, Corina Yoris, han sido la gota que colmó el vaso para Washington.
Restricciones específicas
El Departamento del Tesoro no renovará la Licencia General 44, que expira esta medianoche y que ha permitido las operaciones de empresas extranjeras en el sector petrolero y gasístico venezolano durante los últimos seis meses.
Las empresas tienen 45 días, hasta el 31 de mayo, para cerrar de forma ordenada todas las actividades que tenían en virtud de esta normativa. En su lugar, el Tesoro ha emitido la Licencia 44A, que obliga a las empresas extranjeras que deseen hacer negocios con la petrolera estatal Petróleos Venezolanos (PDVSA) a solicitar autorizaciones individuales que serán evaluadas caso por caso.
Washington puede denegar estos permisos si considera que violan la seguridad nacional y los intereses de política exterior de Estados Unidos.
Las restricciones no afectan a las operaciones en Venezuela de Chevron, la empresa estadounidense que tiene una licencia especial desde 2022, cuando la guerra de Ucrania perturbó el mercado mundial de crudo.
Respuesta de la política estadounidense
El restablecimiento de las sanciones supone un cambio en la política de la Administración Biden, que había intentado distanciarse de la estrategia de "máxima presión" de su predecesor, Donald Trump, para derrocar a Maduro.
El regreso de las sanciones ha suscitado un debate dentro del gobierno demócrata por la posibilidad de que provoquen un aumento de la migración hacia Estados Unidos y un alza de los precios de la gasolina, pero ha prevalecido la opción de dar una respuesta contundente al mandatario venezolano.
Estados Unidos reconoce que el chavismo ha cumplido algunos compromisos electorales, como la actualización del registro de votantes y la aceptación de misiones de observación electoral.
Además, Washington y Caracas realizaron un intercambio de prisioneros en diciembre pasado, en el que quedó libre Alex Saab, presunto testaferro de Maduro.
Llamamiento a elecciones justas
Sin embargo, el sistema judicial venezolano ha mantenido la inhabilitación de María Corina Machado y las autoridades han impedido el registro de su suplente, Corina Yoris, lo que ha suscitado críticas incluso de gobiernos aliados de Maduro como Colombia y Brasil, con los que Washington ha mantenido estrechos contactos.
La Plataforma Unitaria Democrática, el principal bloque opositor, ha inscrito provisionalmente para las elecciones a Edmundo González Urrutia y se encuentra en debates internos para nombrar a un candidato definitivo.
El Departamento de Estado de EE.UU. reiteró este miércoles en un comunicado su exigencia de que "Maduro permita que todos los candidatos y partidos participen en el proceso electoral y libere a todos los presos políticos sin más demora".
El fin de la licencia no es una decisión que tomemos a la ligera. Es una decisión que tomamos basándonos en el hecho de que Maduro no ha adoptado medidas concretas para restablecer el orden democrático en Venezuela.
Ned Price, portavoz del Departamento de Estado de EE.UU.
Impacto potencial
El restablecimiento de las sanciones podría tener un impacto significativo en la economía venezolana, que depende en gran medida de sus exportaciones de petróleo.
Las sanciones también podrían provocar un aumento de la inflación y la escasez de bienes básicos en Venezuela.
Además, las sanciones podrían dificultar que el gobierno de Maduro pague sus deudas y obtenga financiación para proyectos de desarrollo.
Perspectivas de futuro
Es demasiado pronto para decir cuál será el impacto a largo plazo del restablecimiento de las sanciones.
Sin embargo, está claro que la Administración Biden está enviando un mensaje claro a Maduro: Estados Unidos está dispuesto a utilizar todas las herramientas a su disposición para presionarlo para que restablezca la democracia en Venezuela.
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