Supererupciones Volcánicas: Una Amenaza Real para el Planeta
La amenaza inminente de una supererupción volcánica mantiene en alerta a los científicos, quienes advierten sobre la posibilidad de un caos global sin precedentes.
El impacto devastador del pasado
En 1815, el volcán Tambora en Indonesia desató una violenta erupción que proyectó una inmensa columna de partículas a la atmósfera, provocando el "Año sin verano" en 1816. Las temperaturas globales descendieron, los cultivos fracasaron y se extendió el hambre por todo el mundo.
La amenaza latente
Hoy en día, la amenaza de una nueva supererupción persiste. El profesor Stoffel de la Universidad de Ginebra predice una probabilidad del 1 entre 6 de que ocurra una erupción devastadora durante este siglo. Con una población mundial en constante crecimiento y una crisis climática en curso, las consecuencias serían catastróficas.
Consecuencias del enfriamiento global
A pesar de que las erupciones volcánicas liberan dióxido de carbono, su impacto en el calentamiento global es insignificante en comparación con las emisiones humanas. Sin embargo, las partículas de aerosol emitidas durante las erupciones pueden reflejar la luz solar, enfriando la Tierra.
Regiones volcánicas de alto riesgo
Las regiones volcánicas activas como Indonesia y el Parque Nacional de Yellowstone se consideran zonas de alto riesgo para futuras erupciones. El volcán Campi Flegrei cerca de Nápoles, Italia, también ha mostrado actividad reciente, amenazando a más de un millón de personas.
Prepararse para lo inevitable
Si bien no se puede predecir con certeza la próxima gran erupción, los científicos están investigando los efectos de erupciones pasadas utilizando datos de satélites, núcleos de hielo y anillos de árboles. Estudian las consecuencias regionales de un descenso global de temperatura de 1 grado Celsius, incluidas interrupciones agrícolas, fenómenos climáticos extremos y conflictos sociales.
Artículos relacionados