Telescopio James Webb descubre galaxia espiral ultramasiva en el universo primordial
El telescopio espacial James Webb descubre la galaxia espiral ultramasiva más lejana del universo
Descubrimiento fortuito
El telescopio espacial James Webb ha encontrado una galaxia espiral ultramasiva que se formó apenas mil millones de años después del Big Bang. Esta galaxia, llamada Zhúlong, fue descubierta por accidente durante el programa PANORAMIC, un sondeo destinado a capturar imágenes extragalácticas con ayuda de su cámara infrarroja cercana (NIRCam).
El nombre Zhúlong, que significa "Dragón rojo" en chino, describe bien a esta galaxia, que presenta propiedades que desafían las teorías actuales de formación galáctica.
Una galaxia espiral en el universo temprano
Las galaxias espirales de gran diseño son conocidas por sus enormes y bien definidos brazos que giran hacia el exterior desde un núcleo claro. Sin embargo, son extremadamente raras en el universo temprano, y generalmente estas preciosas estructuras se formaron en épocas posteriores. Por lo tanto, el descubrimiento de Zhúlong es completamente relevante.
Zhúlong se formó apenas mil millones de años después del Big Bang. Su masa es comparable a la que posee la Vía Láctea. El análisis realizado demuestra que su núcleo es un disco estelar frontal y tiene brazos espirales. Los brazos de esta galaxia se extienden a lo largo de 62 mil años luz, y su núcleo muestra características de quiescencia (ausencia de formación estelar activa). Sin embargo, su disco sigue generando estrellas a un ritmo de 66 masas solares por año.
Características desafiantes
El núcleo quiescente de Zhúlong es uno de los más compactos de los que se tiene registro. De igual manera, la eficiencia de conversión de bariones en estrellas es 1,5 veces mayor que en galaxias posteriores, lo que alcanza un valor de 0,3. Esto sugiere que la galaxia atravesó una formación estelar altamente eficiente antes de que entrara en un proceso de transformación hacia la quiescencia.
El descubrimiento de Zhúlong ofrece una nueva perspectiva sobre la formación de las galaxias espirales maduras en un universo temprano. Además, cambia la idea que se tenía acerca del desarrollo temprano de estructuras espirales complejas.
Este descubrimiento demuestra que las galaxias maduras comenzaron a surgir antes de lo que habíamos anticipado, alterando nuestra comprensión de la cronología evolutiva del universo temprano.
- Mengyuan Xiao, Universidad de Ginebra
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