Vaca Muerta registra 43 sismos en 2024, el primero en julio
Vaca Muerta, la cuenca petrolera neuquina, continúa temblando. En el primer día de julio se registró un nuevo sismo, el primero del mes en la zona. El movimiento telúrico, de magnitud 3,4 en la escala de Richter, tuvo su epicentro a unos 35 km al norte de Añelo y una profundidad de 8 kilómetros.
Sismicidad inducida en Vaca Muerta
Desde que comenzó el año, se han registrado 43 sismos en la provincia de Neuquén, de los cuales solo 10 pueden atribuirse a causas naturales. El resto, según el Observatorio de Sismicidad Inducida, están asociados a la extracción no convencional de petróleo en la zona.
En el mes de junio, el INPRES registró 13 movimientos sísmicos asociados a esta actividad. El último sismo, ocurrido el 3 de julio, se produjo a pocos kilómetros de un equipo de fractura que se encontraba operativo.
Preocupación por la actividad sísmica
La sismicidad inducida en Vaca Muerta ha generado preocupación entre los habitantes de la zona y las autoridades. Los sismos, aunque generalmente de baja intensidad, pueden causar daños a las viviendas y a la infraestructura.
Además, la actividad sísmica podría tener un impacto negativo en la actividad petrolera en la zona. Las empresas petroleras podrían verse obligadas a reducir su producción o a suspender sus operaciones si la situación continúa.
Medidas para mitigar la sismicidad
Para mitigar la sismicidad inducida, el gobierno provincial y las empresas petroleras están trabajando en conjunto para implementar medidas de control.
- Monitoreo constante de la actividad sísmica.
- Reducción de la presión de inyección de agua en los pozos de fractura.
- Optimización de las técnicas de fractura hidráulica.
Investigación y desarrollo
También se están llevando a cabo investigaciones para comprender mejor la sismicidad inducida en Vaca Muerta y desarrollar nuevas tecnologías para mitigarla.
El Observatorio de Sismicidad Inducida, creado en 2023, juega un papel fundamental en este sentido. El observatorio monitorea la actividad sísmica en la zona y realiza estudios para identificar los factores que la desencadenan.
La sismicidad inducida es un problema complejo que requiere un enfoque integral. El gobierno, las empresas petroleras y la comunidad científica deben trabajar juntos para encontrar soluciones que permitan continuar con la actividad petrolera en Vaca Muerta de manera segura y responsable.
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