Vacas frente a la sequía: convierten su leche en agua potable
La prolongada sequía que asola Europa, en particular España, ha llevado a una innovadora técnica que podría mitigar la escasez de agua: extraer agua de la leche de vaca.
Un método novedoso para paliar la sequía
Una empresa láctea en Saint-Malo, Francia, ha desarrollado un proceso para convertir la leche en un polvo rico en proteínas, liberando así agua adicional. Esta tecnología podría aliviar la presión sobre las reservas de agua potable y reducir los costes para las empresas lácteas.
El proceso de extracción de agua
La leche se inyecta en un concentrador, donde se separa el agua de las proteínas. El concentrado resultante se seca y se pulveriza, creando un polvo seco. Concretamente, cuatro litros de leche producen un litro de concentrado y tres litros de agua condensada.
Regulación y precauciones
Las autoridades francesas y los organismos reguladores aún están revisando el proceso para garantizar la seguridad para el consumo humano. El agua extraída de la leche se utiliza actualmente en plantas de tratamiento de aguas residuales, dando prioridad a la prevención de riesgos.
Beneficios potenciales
Además de reducir la demanda de agua potable, este proceso podría generar importantes ahorros para las empresas lácteas. Por ejemplo, la fábrica de Saint-Malo utiliza hasta 25 millones de litros de agua al año, un coste que podría reducirse significativamente.
Inversiones y desarrollo futuro
Para implementar ampliamente este proceso, se necesitan inversiones adicionales y un proceso de potabilización del agua. Los expertos creen que el potencial de este método es significativo y podría aprovecharse para explotar nuevas fuentes de agua reutilizable.
Artículos relacionados