Marcha de la CGT: Bullrich activa protocolo antipiquetes para impedir cortes
¡La batalla del Congreso: Bullrich promete no dejar cortar calles en la marcha de la CGT!
El choque entre el Gobierno y los sindicatos
El próximo miércoles 12 de junio, se vivirá una jornada de alta tensión en las calles de Buenos Aires, cuando diversas organizaciones sindicales y de derechos humanos se movilicen al Congreso Nacional para expresar su rechazo a la Ley Bases propuesta por Javier Milei.
En una conferencia de prensa realizada en la sede del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), líderes sindicales como Ricardo Pignanelli (Camioneros), Pablo Moyano (Camioneros), Hugo Yasky (CTA) y Taty Almeyda (Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora) anunciaron su determinación de asistir a la movilización.
El escenario en el Congreso
El mismo día de la movilización, el Senado sesionará a partir de las 10 de la mañana para tratar no solo la Ley Bases, sino también un paquete fiscal que ya cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados.
Ante la expectativa de una movilización masiva, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, adelantó que se implementará el protocolo antipiquetes en el Congreso y sus alrededores.
La decisión de Bullrich: "No van a poder cortar"
"Hay una decisión política muy fuerte: las calles están para circular y las plazas para movilizar. Como siempre, va a haber protocolo y no van a poder cortar calles", afirmó Bullrich.
La ministra advirtió que, pese a la cantidad de manifestantes, el protocolo se aplicará de manera estricta. "Si buscan provocar, no lo vamos a permitir", agregó.
El rechazo del proyecto de Milei
Los sindicatos y organizaciones sociales que participarán de la movilización rechazan la Ley Bases de Milei por considerarla perjudicial para los trabajadores y los derechos humanos.
El proyecto propone una reducción del gasto público, la eliminación de impuestos y una reforma laboral que flexibilizaría las condiciones de trabajo.
El precedente del 17 de octubre
La movilización del 12 de junio se produce después de la marcha del 17 de octubre de 2019, en la que se registraron incidentes entre manifestantes y las fuerzas de seguridad.
En aquella ocasión, Bullrich también implementó el protocolo antipiquetes y justificó el uso de la fuerza argumentando que había habido provocaciones por parte de los manifestantes.
"Vamos a movilizarnos masivamente para defender nuestros derechos y expresar nuestro rechazo a un proyecto que sólo beneficia a los sectores más ricos", declaró Ricardo Pignanelli, secretario general del SMATA.
Ricardo Pignanelli, secretario general del SMATA
El desafío para Bullrich
La marcha del 12 de junio representa un desafío para la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien deberá garantizar el orden público y el derecho a la manifestación.
El uso del protocolo antipiquetes ha sido cuestionado por organizaciones de derechos humanos, que denuncian un uso excesivo de la fuerza.
Las posibles consecuencias
El desarrollo de la movilización y la respuesta de las fuerzas de seguridad podrían tener un impacto significativo en el clima social y político del país.
Si se producen incidentes, el Gobierno podría verse debilitado y la oposición podría ganar terreno. Por otro lado, si la marcha transcurre pacíficamente, podría fortalecer la institucionalidad democrática y el diálogo entre el Gobierno y los sindicatos.
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