Tasa turística para cruceristas de corta estancia en Barcelona
Este artículo explora la propuesta del alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, de aumentar la tasa turística para los cruceristas que pasan menos de 12 horas en la ciudad. El objetivo es combatir las consecuencias negativas del turismo masivo, como la congestión, el ruido y el uso excesivo de los recursos. Collboni también aborda otras preocupaciones relacionadas con el turismo, como la proliferación de apartamentos turísticos y el impacto en la asequibilidad de la vivienda.
Aumento de la tasa turística para cruceristas
Collboni propone aumentar la tasa turística local para los cruceristas que pasan menos de 12 horas en Barcelona. Actualmente, la tasa turística comprende un tramo autonómico y local, y Collboni busca elevar el tramo local. El objetivo es que los cruceristas paguen lo que cuesta estar en la ciudad y evitar el turismo excesivo, que puede perjudicar los derechos de los residentes.
Otros impactos negativos del turismo
Además de la congestión causada por los cruceros, Collboni también señala los apartamentos turísticos como otra consecuencia negativa del turismo masivo. Reafirma su intención de anular las licencias en edificios enteros, una medida que también apoyan algunos hoteleros. En cuanto a la posibilidad de que el decreto de la Generalitat sea anulado, Collboni confía en que el plan continuará y no prevé que el Tribunal Constitucional revoque el decreto.
Esperando un nuevo liderazgo en el puerto
Collboni también menciona la necesidad de esperar al nuevo liderazgo en el Puerto de Barcelona antes de discutir la posible reubicación de terminales. Destaca la importancia de mantener conversaciones con los nuevos responsables para explorar soluciones que mejoren la gestión del turismo y reduzcan su impacto negativo en la ciudad.
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